Puerto Real ha despedido José María Sasián Marroquí, fallecido este miércoles a los 81 años. Sasián (1943-2024) fue nombrado concejal del Ayuntamiento de Puerto Real en 1968, y alcalde de la ciudad en los últimos años del franquismo y durante los comienzos de la Transición (1974-1978). Hijo de Félix Sasián Varela (propietario del añorado Cine Sasián de la localidad) e Isabel Marroquí, será recordado por su liderazgo conciliador, dejando una huella imborrable en la ciudad, donde impulsó las primeras viviendas sociales.

La alcaldesa de Puerto Real, Aurora Salvador Colorado, en nombre de la Corporación Municipal, ha querido transmitir su más sentido pésame a la familia y seres queridos. “José María no solo fue un líder en tiempos de cambio, sino también un ciudadano ejemplar y un pilar en la historia de nuestro municipio contribuyendo significativamente al desarrollo y bienestar de Puerto Real”.

José Antonio Barroso, también exalcalde de Puerto Real (líder sindical cuando Sasián dirigía el Consistorio), recuerda una anécdota que refleja cómo “José Mari defendió siempre los intereses de los puertorrealeños”. Para ello se remonta a un día de 1978, en pleno preámbulo de la reestructuración del sector naval. Un grupo de manifestantes, entre los que se encontraba Barroso, protestaba frente al Ayuntamiento contra la primera rotación de trabajadores de astilleros, que implicaba la lenta destrucción de cientos de empleos. Cuando nadie lo esperaba, salió José María flanqueado con su equipo de Gobierno, se subió al escenario y prometió, altavoz en mano, que, si el Gobierno municipal no llegaba a un acuerdo con astilleros para frenar la rotación, todos dimitirían. Finalmente se llegó a un compromiso para la construcción de unos cuantos buques y se calmó la situación, por un tiempo. 

Sasián entrega un premio de Carnaval a Fernando Migueles como directivo de Unicaja en 2004

Sasián abandonó la política para hacer carrera en la banca y acabó asumiendo durante años la dirección de Unicaja en la provincia de Cádiz. “Un banquero de confianza que siempre aportaba soluciones”, recuerda Teófila Martínez, exalcaldesa de Cádiz. “Y lo hacía con la mayor humildad. Imposible no recordar a José María Sasián”. 

Manuel Villalpando, presidente del Ateneo Literario de Puerto Real que el pasado mes de enero lo nombró ‘Puertorrealeño del Año’, y compañero de Sasián en Unicaja, coincide en que tras esa fragilidad engañosa se escondía un hombre firme y con gran habilidad para los números. “En un descuadre de 10.005 pesetas, él te decía: ‘olvídate de las 10.000 que saldrán solas y busca las 5”. Pero en lo que todos coinciden es que más allá del buen hacer, José María Sasián fue una gran persona. “La sonrisa de la bondad”, según Teófila Martínez.