Las inversiones del presupuesto municipal de 2018 contemplan una partida de 150.000 euros para los planes de soterramiento de contenedores que tiene el Área de Desarrollo Sostenible. En este caso, se centra en tres puntos del casco histórico donde se ubican bidones de basura que han sido objeto de muchas críticas y quejas por parte de los vecinos, de formaciones políticas y colectivos. Especialmente significativas han sido las reclamaciones por la existencia de los containers en el callejón de la Soledad, en el lateral de la Iglesia Mayor, un edificio reconocido como Bien de Interés Cultural (BIC).

Precisamente, esta catalogación ha estado en el origen de las críticas que desde hace tiempo recibía el Ayuntamiento por la presencia de estos contenedores de basura, una ubicación que se consideraba inadecuada por estar en el entorno de este monumento protegido. Izquierda Unida (IU) o Plataforma 3R han sido las más insistentes en sus demandas contra esta situación. De hecho 3R llevó su denuncia por "violación flagrante de la Ley de Patrimonio Histórico" al Defensor del Pueblo Andaluz, que requirió información al Ayuntamiento en varias ocasiones.

Hasta este callejón se habían desplazado los contenedores, como el lugar con mayor consenso entre los vecinos, hosteleros y comerciantes usuarios de la zona, desde su primer emplazamiento ante la fachada del edificio de Telefónica en la calle Real para minimizar su impacto, según las explicaciones del gobierno local. Como se comunicó al Defensor del Pueblo Andaluz por parte del equipo de gobierno en mayo, ahora se prevé un nuevo traslado, pero esta vez soterrando los diferentes contenedores que existen en la zona.

Para ello Desarrollo Sostenible estudia previamente la ubicación más adecuada y sobre todo un espacio que pueda albergar los contenedores y la plataforma elevadora, el mecanismo que permite a los servicios municipales retirar los residuos. Eso dará, a continuación, redactar el proyecto, puesto que ya hay partida para las obras.

En concreto, el presupuesto municipal recoge una partida de 150.000 euros para los tres puntos donde se planifica retirar los bidones para soterrarlo. El dinero procede de una de las dos operaciones de crédito que a final de 2018 suscribió el Ayuntamiento para hacer frente a las inversiones previstas y de las que se dio cuenta en el pleno de enero, que se celebró en segunda convocatoria el pasado martes. En la sesión el concejal de Desarrollo Sostenible, Fran Romero, apuntaba la cantidad y que el proyecto estaba en proceso de redacción.

Otros dos puntos donde se ubican contenedores que han despertado las quejas ciudadanas son la esquina de la calle Héroes del Baleares con la calle Real y la esquina de Almirante Cervera con Real –donde está el Dean– por los fuertes olores que desprenden y la mala imagen que ofrecen, incluso cuando ciertas personas dejan las bolsas de residuos fuera de los recipientes. Por ejemplo, el PP se hacía eco recientemente de la preocupación de los vecinos de la zona de la Alameda por el estado de los contenedores y el problema de insalubridad que pueden provocar.

Como en el caso de los contenedores del callejón de la Soledad, también para estos Desarrollo Sostenible analizará la ubicación más correcta tanto para la comodidad de los usuarios como para terminar con las molestias, siempre comprobando que sea un espacio suficiente para alojar todo el mecanismo.