Quedan cuatro jornadas de ACB antes del primer parón de esta temporada por las ventanas de partidos internacionales de selecciones. Se jugará el 20 de noviembre ante el Fuenlabrada y se volverá en Sevilla el 5 de diciembre. Igualmente, en febrero de 2022 se jugará la Copa del Rey en el fin de semana del 17 al 20 y volverá la competición el 5 de marzo, con el Unicaja-UCAM. En caso de que no lograra la clasificación, el anterior partido sería el 13 de febrero ante el Real Madrid.

A expensas de a quién decide convocar Scariolo con España (Brizuela, Fernández, Díaz, Barreiro, Alonso y Guerrero intervinieron en la clasificación para el Europeo), Bouteille no ha entrado en la lista de Francia y quedaría Abromaitis, Eric (susceptible de ir con Nigeria, aunque poco probable), Cole, Nzosa, Suárez y Pablo Sánchez.

El Unicaja está haciendo trabajo de previsión para prepararse para trabajar esas semanas y evitar desconexiones. Serán los jugadores de la cantera los que completen los entrenamientos en esas fechas, como ya sucedió en temporadas anteriores. Y por ello se están realizando todas las semanas algo novedoso, aprovechando que el cambio a la Basketball Champions League deja más hueco en el calendario. El staff técnico de Fotis Katsikaris, formado por Ángel Sánchez-Cañete, Paco Aurioles y Alberto Miranda, está trabajando semanalmente con un grupo de jugadores de los equipos junior y cadete del club en Los Guindos.

Hay varios objetivos con la medida. A corto plazo, que los jugadores tengan clara la metodología del primer equipo y qué se espera de ellos cuando sean reclutados para enriquecer las sesiones de Katsikaris cuando haya carencia de jugadores. Hay también un conocimiento más profundo de parte de los técnicos que están en la cúspide de las generaciones que vienen, un flujo de información que también revierte hacia abajo. Los jugadores tienen un incentivo claro con estas sesiones de trabajo cuando se les sugiere que el salto, aunque sea para entrenar, hacia arriba es alto tangible y que van a poder entrenar durante varios periodos del año con los jugadores del primer equipo.

Con la lesión de Rafa Santos, además de Pablo Sánchez están inscritos en la Basketball Champions League José Roberto Tanchyn, el que más jugó en pretemporada con los grandes, Álvaro Fernández, Rubén Vicente y Álvaro Folgueiras. Este último es el que más está despuntando en este arranque de temporada, con un MVP en Liga EBA y más actuaciones que salen de la normalidad a las órdenes de Antonio Herrera. Los tres últimos tienen una temporada más de junior por delante además de la actual. También trabajan jugadores cadetes del equipo que dirige Chiki Gil.

El director deportivo, Juanma Rodríguez, ya hablaba públicamente la semana pasada de que se trabajaba para, si pudiera ser la próxima temporada, recuperar un equipo en LEBPlata con un formato similar al antiguo Clínicas Rincón para acortar el paso, corto en distancia física pero largo realmente por la exigencia del baloncesto profesional, entre Los Guindos y el Carpena. Un Yannick Nzosa no se encuentra fácilmente y lo normal es un proceso de cocción más largo, al que un equipo en la tercera categoría del baloncesto nacional podría ayudar, como sucedió en su día con Alberto Díaz, de los actualmente en el primer equipo, más un puñado más esparcidos por la ACB, la Euroliga y la NBA.