Minimizar al imparable Tavares
El gigante caboverdiano se erige como la mayor amenaza de un Unicaja que ya sufrió ante el Barça bajo los aros
Ibon Navarro insistió en la previa: "La idea de partido irá por ahí, es diferencial en ataque y defensa"
Barreiro, el antídoto selectivo

No hay un jugador en Europa que genere más influencia en el equipo rival como Edy Tavares, único en su especie, que además ha sabido limar aspectos de su juego con el paso de las temporadas. Ahora es más que un gigante intimidador, hace muchas más cosas en la pista, adaptado a lo que te exige el baloncesto actual y la posición de pívot en particular. Le tocará al Unicaja este sábado buscar fórmulas para que el caboverdiano sufra, minimizar sus capacidad a la hora de dominar partidos, ardua tarea porque el conjunto malagueño es un equipo, que por sus carencias en la pintura, debería relamerse Tavares. Una de las lecturas negativas frente al Barça fue esa batalla en el rebote, por momentos de impotencia a la hora de plantar cara, con Vesely, Mirotic o Sanli fue desesperante, y con el Madrid debería ser más difícil aún. Una plantilla la de Chus Mateo que cuenta con gente muy grande como Poirier, Yabusele o Deck, y no está la rotación del Unicaja como para pegarse, pero verte ahí ya debería compensar todo lo demás.
Pero en especial Tavares. Ibon Navarro insistía con el coloso madridista en la previa. "Lo primero que tenemos que ver es cómo estamos nosotros para poder hacer el plan que queremos. Es evidente que la forma de jugar del Madrid es muy diferente a la del Barça, está muy condicionada por un jugador diferencial como Tavares, tanto en ataque como defensa; por ahí va la idea del partido viendo cómo sufrimos en el rebote", reconocía el vitoriano en la previa del partido. Kravish y Osetkowski tendrán que jugar muy lejos de la pintura para así abrir espacios en la zona, será habitual, con las consecuencias que conllevaría en el ataque, pero hay que hacer una excepción ante alguien así. Habrá que ver además el papel que podría tener Will Thomas, ya sorprendió Ibon Navarro ante el Barça en un duelo precioso ante Vesely, donde el de Baltimore generó un destrozo al checo.
Más complejo será a la hora de defender. Tavares ha demostrado ser un gran jugador en el poste, con buena capacidad de leer los espacios y ser el eje del ataque, precisamente las funciones de Will Thomas en esa prórroga ante los de Jasikevicius. Es frecuente verle organizar las jugadas a partir de recibir a pocos metros de canasta, y con las ayudas, en infinidad de ocasiones inútiles, generar situaciones de ventaja al resto de sus compañeros. No destaca tanto en asistencias (solo 1,3 por partido en ACB), pero produce más de lo que dicen los números. Además, con infinidad de armas para finalizar, tiene un abanico amplio en su juego, no solo anota debajo del aro. Ha ido puliendo ese tiro en 'bomba' que suele dar buen resultado, se ha vuelto más técnico pese a su apariencia, también con una eficiencia a considerar desde el tiro libre (en un 75% esta temporada). Viene de hacer 11 puntos, 8 rebotes y 23 de valoración frente a Valencia Basket, el mejor de los blancos junto a Deck.
¿Y cómo se para a Tavares? Imposible, no hay antídoto que valga. La clave es generarle estrés, sacarle lejos de su zona de comodidad y poner trabas. La superioridad que alcanza por momentos es a veces insultante, y es un producto único, irrepetible, que solo tiene el Real Madrid. Es habitual escuchar que tal equipo tiene un 'anti-Tavares', seguro que Ibon Navarro está indagando el suyo particular en estas horas previas. Si se le puede minimizar, el Unicaja tendrá mucho ganado.
También te puede interesar
Lo último