El Pabellón Príncipe Felipe de Zaragoza siempre trae buenos recuerdos para el universo Unicaja. Allí ganó una Copa del Rey, el primer título nacional, en 2005. El pívot titular de aquel equipo era un rutilante Fran Vázquez que acabaría elegido en el puesto 11 del draft de la NBA ese año. 14 años después, el gallego continúa, camino de los 36, jugando a un dignísimo nivel defendiendo el color rojo del Tecnyconta. La vena competitiva de Fran Vázquez no descansa. Le hubiera gustado jugar sus últimos días en Málaga, la que considera su casa. No fue posible.

Fran Vázquez es uno de los faros de un Tecnyconta que está completando una temporada muy buena, sin agobios y con el play off a tiro y que hoy aguarda al Unicaja (17:00 horas, Dial 55 de Movistar). La victoria de la semana pasada ante el Baskonia recuerda que va en serio. Hay una tradición de baloncesto muy buena a la vera del Ebro. De alguna manera, el histórico CAI era una suerte de Unicaja en los 80 y primera mitad de los 90. Títulos, finales europeas... En otro contexto baloncestístico, claro. Es una plaza exigente porque ha visto a grandes jugadores. Se trabaja bien la base, han salido jugadores interesantes rumbo a equipos potentes (Sergi García a Valencia o Jaime Fernández a Barcelona) y ahora se alumbra a Carlos Alocén, parece que una estrella en ciernes.

Allí viaja un Unicaja que se encuentra en un momento de incertidumbre, aún digiriendo el palo europeo. La victoria ante el Obradoiro concedió un poco de árnica, pero se sigue corriendo el riesgo de quedarse sin objetivos grandes realizables de aquí a final de temporada. Es por ello que tanto Carlos Jiménez como Luis Casimiro han verbalizado en sus comparecencias de las últimas semanas que el objetivo pasa por mejorar y que una hipotética presencia en la Euroliga vendría derivada de una progresión en el juego. La profesionalidad va por delante.

Comienza en Zaragoza el esperado proceso de reintegración de los lesionados. Alberto Díaz regresa en el Príncipe Felipe y la próxima semana lo hará Jaime Fernández, que viajó también, pero no se vestirá. Esta mañana se esperaba la llegada de Lucas Muñoz para completar el equipo tras jugar su partido de Liga EBA ayer en Los Guindos ante el Torta del Casar. Huelga hablar de la importancia de Alberto Díaz en el entramado del equipo malagueño, cómo su corazón y capacidad defensiva hace que todo parezca más cuadrado de lo que está ahora mismo, de que se multipliquen las cualidades de sus compañeros. Desde ayudas defensivas hasta marcar el nivel de intensidad al que se debe encontrar el base rival. Ha jugado sólo 14 partidos esta temporada y en los cinco últimos meses apenas lo hizo en seis encuentros, así que hay que ser pacientes.

Aunque el Valencia consiga la plaza en la Euroliga vía título de Eurocup, el Unicaja no se puede abandonar. Es el mensaje lógico que emana desde el club y la exigencia lógica de la afición y el entorno. Zaragoza es el siguiente escalón de esa batalla contra sí mismo.