El Pabellón Carlos Cabezas de Marbella fue escenario este martes de un emotivo reencuentro entre tres campeones de Copa y de Liga del Unicaja en 2005 y 2006. El arquitecto, Sergio Scariolo, y dos piezas muy importantes, el que da nombre al pabellón marbellí y Walter Herrmann.
Scariolo es marbellí de adopción y allí reside cuando no atiende a múltiples compromisos de todo tipo, relacionados con el baloncesto en su condición de seleccionador y director deportivo. Cabezas volvió de Venezuela, donde fue hace unas semanas campeón de la Liga Sudamericana con el Guaros de Lara. Tiene la opción de regresar a Barquisimeto, donde ha dejado un grato recuerdo. Pero está abierto a proposiciones de España.
Por último, Walter Herrmann. Tras acabar con el Obras Basket está sin equipo. Su mujer es malagueña y tiene en mente jugar algún año más en Sudamérica antes de regresar a Málaga. Una opción es ir con Carlos Cabezas al Guaros de Lara. Entrena allí Fernando Duró, que conoce bien a Herrmann de su etapa como ayudante en la selección albiceleste.
Cabezas y Herrmann habían coincidido y están trabajando físicamente para no perder el tono en la Reserva del Higuerón. Contactaron con Sergio Scariolo y allí estuvieron departiendo sobre un rato sobre aquel inolvidable mejor equipo de la historia del Unicaja.
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