Unicaja

Will Thomas, dos lecciones

Will Thomas, en el Palau

Will Thomas, en el Palau / ACB PHOTO

El Unicaja dominó con puño de hierro en el Palau, con escasos momentos de crisis, habituales en este tipo de plazas. De matrícula de honor el cuadro malagueño ante el Barça, superior en la eliminatoria salvo la primera parte del primer partido, más los cinco minutos tras el descanso del segundo, cuando los azulgranas se ponían por delante en el marcador y se empezaba a barruntar el desastre, tendencia de un partido que varió y un 52-47 crítico, mientras el Barça crecía. Es un momento clave de la eliminatoria hasta el momento por cómo supo salir el conjunto cajista de una trampa mortal. Apareció en ese instante Will Thomas con un mate a cámara lenta pero imponente, de esas acciones imprescindibles para aflorar esa confianza, después fue el jardín del Unicaja. Un parcial de 5-17 posterior que fue la entrada para romper el partido, en otro día de amplias lecciones del tío Will, experto en elevarse en ocasiones complicadas. Impagable.

Pero el episodio donde el pívot de Baltimore apareció con creces fue con ese placaje, con posterior llave, a Kravish, capaz de inmovilizar a su compañero tras la canallada de Vesely. El '45' se revolvió en el suelo directo a por el checo, y ahí apareció Thomas ipso facto para prohibir una tángana masiva que se podía avecinar. Sangre fría, inteligencia porque el vestuario tiene muy asimilado el evitar todos estos revuelos, mucho que perder, y todo el trauma del miércoles. Otra imagen elocuente en esa jugada es ver a Alberto Díaz juntando a sus compañeros, iniciativa de capitán. Todo tan poético, que a partir de ahí el Barça desapareció del mapa, golpe definitivo, saludo cordial de Kravish y Vesely antes, y el Unicaja ya tenía el 1-1 en el bolsillo. Momentos y detalles.

Infinidad de causas de por qué el Unicaja tuvo la capacidad de bailar en el Palau. Unión en esos tiempos de zozobra, talento cuando se huele sangre y jugadores líderes. Will Thomas reúne esos tres conceptos, que no tuvo el peso de Ejim o Carter, pero aparece en dos fotos de alta carga simbólica. "La gente está muy feliz por estar en semifinales, contenta por jugar contra el Barcelona. Es una nueva oportunidad de probarnos y medirnos a nosotros mismos. Es una buena temporada hasta ahora, pero hay mucho que pelear aún", ahondaba Thomas en la previa de la serie, efectivamente con brega por delante y dos partidos en el Carpena para volver a una final de ACB 17 años después.

  

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