Jack Cooley, una curiosa presencia con Estados Unidos

Cuando se recuerda a Jack Cooley (Illinois, 1991) en Málaga, se habla de un jugador que dejó una huella positiva en apenas seis meses hace justo diez temporadas. Llegó al Unicaja en el ecuador de la 15/16 para reemplazar a Germán Gabriel y cayó de pie desde el primer día. Su actitud guerrera, su competitividad y su dureza le convirtieron en un jugador querido en el Carpena. Un carisma natural que se unía a un estilo de juego que él mismo comparaba con Dennis Rodman, en una anécdota que aún recuerdan los seguidores del Unicaja. “Me compararía con Dennis Rodman, físico, rebote… eso sí, no estoy tan loco fuera de la cancha”, dijo el americano en su presentación. Aún se pueden ver algunas camisetas del americano salpicadas por el Carpena.

Es curioso ver a Cooley con la selección estadounidense, diez temporadas después de su paso por Málaga, debutando oficialmente a sus 34 años en la AmeriCup 2025, que arrancó en Nicaragua. Forma parte de un conjunto de nivel modesto, compuesto principalmente por jugadores con experiencia FIBA y en ligas internacionales fuera de la órbita NBA. Entre los nombres más destacados están Jerian Grant, de Panathinaikos, y Tyler Cavanaugh, de Zalgiris, mientras que el resto del roster combina jugadores internacionales consolidados y algunos con pasado ACB, como Jarell Eddie, Andrew Andrews… y el propio Cooley. Estados Unidos debutó la pasada madrugada ante Bahamas, imponiéndose en la prórroga por 105-93. Cooley disputó 13 minutos, aportando 4 puntos y 4 rebotes. Sin la exuberancia de antaño quizá, pero con un nervio intacto.

Durante su temporada en Málaga, Cooley disputó 27 partidos en la Liga ACB, promediando 5.5 puntos y 3.7 rebotes por encuentro. En Euroliga, participó en 14 partidos con 6.3 puntos y 4.3 rebotes en 13 minutos de media, con una valoración de 8.8. Su paso por Málaga, aunque breve, se recuerda por su actitud e intensidad, sin ser técnicamente un privilegiado, pero con una apariencia que además le convirtió en un jugador carismático. No siguió, en parte, por su condición de extracomunitario y continuó con su carrera internacional. Tras salir del Unicaja en verano de 2016, Cooley continuó su carrera internacional: en Turquía con Trabzonspor, en Alemania con MHP Riesen Ludwigsburg y en Italia con Dinamo Sassari, destacando siempre como reboteador y jugador intenso en la pintura. En la FIBA Europe Cup, en el curso 18/19, promedió 11.2 puntos y 6.5 rebotes en 22 partidos. Desde 2019 juega en Japón con los Ryukyu Golden Kings, consolidándose como uno de los interiores más dominantes de la liga nipona, con promedios recientes de 12.3 puntos y 9.9 rebotes por partido.