Justo un mes antes del inicio de la Copa del Rey de Málaga 2020, el Museo Picasso sirvió el aperitivo con un sorteo bastante apetecible para el Unicaja. Con la tabla en la mano, también por regularidad y continuidad en el juego, el equipo malagueño es el peor de los ocho participantes. Así que el Unicaja debe partir desde una premisa de humildad y admitiendo que los demás lo han hecho mejor hasta ahora. Digerido eso, queda un mes para la competición, para crecer y mejorar. Las dinámicas cambian y la Copa es una competición de instantes, de inspiración. Será más sencillo hacerlo bien si antes se han alcanzado cotas altas de rendimiento, pero la imprevisibilidad es intrínseca a este torneo, ahí reside su principal encanto.

Y el sorteo, igual que se debe reconocer ese menor nivel hasta enero, es bastante estimulante. El Unicaja evitaría a los equipos de Euroliga (Real Madrid, Valencia y Barcelona) hasta la final. Marcha por una parte del cuadro en la que, cierto es, ha perdido ante los tres equipos a los que se puede medir antes de llegar al partido definitivo (Casademont primero y Andorra o Tenerife después). Juega en cuartos de final ante el Casademont Zaragoza, que ha cerrado la primera vuelta con un balance de 12-5 y ha tenido momentos de baloncesto sensacional. Y en semifinales, si se gana, Andorra o Tenerife. Ninguno de los otros tres clubes ha jugado nunca una final de la Copa del Rey. El Casademont Zaragoza es un club nuevo respecto al desaparecido CAI primigenio, que sí ganó en 1984 y 1990.

El Unicaja es el equipo de mayor presupuesto y mejor trayectoria, con bastante diferencia, en los últimos 25 años de esos cuatro. Y es el anfitrión. Pero hablamos de 40 minutos y de baloncesto a cuchillo. El equipo malagueño ha ganado a Barcelona, Valencia y Bilbao y ha perdido con Madrid y los tres de su lado del cuatro. El balance entre sí de los ocho equipos participantes es 4-3 o 3-4. Es un teórico aviso de una igualdad rampante de una Liga que permite que un recién ascendido como Bilbao se cuele con honores en la Copa y que clásicos como Baskonia o Gran Canaria la vean por la tela de casa. Da señales de buena salud de la ACB. Hay mucho debate sobre la invisibilidad del baloncesto de clubes, pero eventos como la Copa concentran mucha atención mediática. Y Málaga, no es localismo barato sino declaraciones ante micrófono y fuera de él de los protagonistas, ofrece garantías.

La presentación del sorteo estuvo conducida por Ibai Llanos, un referente en la juventud, a la que la ACB intenta acercarse para ampliar su difusión. Con él, los actores Pablo Puyol y Canco Rodríguez ejercieron de manos inocentes y Sitapha Savané y Lucio Angulo ejercieron de especialistas. Y las instituciones y Antonio Martín glosaron las virtudes de la competición y de Málaga.

Todos los partidos son ofrecidos por el canal #Vamos de Movistar. La competición comenzará el jueves 13 de febrero con el Barcelona-Valencia a las 19:00 horas, seguido Del Real Madrid-Retabet Bilbao (21:30). Para el viernes 14 de febrero queda la segunda jornada de cuartos de final. Empezará el Iberostar Tenerife-MoraBanc Andorra (19:00), seguido del Casademont Zaragoza-Unicaja (21:30), en el último partido de cuartos de final. Las semifinales enfrentarán el sábado 15 de febrero a los ganadores de la jornada del jueves desde las 18:30 y a los ganadores de la jornada del viernes a las 21:00. La final será el domingo 16 de febrero desde las 18:30. Y, aunque sólo ha ganado un partido desde 2009 en la Copa, el Unicaja sueña con ese día.