La Comisaría de la Policía Nacional en Vélez-Málaga ha abierto una investigación para esclarecer un incidente ocurrido en la localidad, después de que un desconocido se dirigiera a un menor y le propusiera “dar una vuelta” en su vehículo.

En ningún momento, según han precisado a este periódico fuentes policiales, medió violencia ni intento de coacción. El niño, ante la proposición, se negó a la invitación del extraño y continuó su camino sin que éste insistiera ni se produjera ningún otro tipo de contacto.

La actuación policial se ha puesto en marcha tras una comunicación interna enviada por la dirección de un centro educativo de la localidad las familias del alumnado. En la circular, el colegio informaba de que “el conductor de un BMW azul oscuro, un hombre de unos 45 años, detuvo su vehículo junto a un alumno que iba en dirección a la piscina del polideportivo y le preguntó si quería subirse al coche y dar una vuelta con él”.

El centro señalaba además en el escrito que los hechos ya habían sido puestos en conocimiento de la Policía Nacional y pedía a las familias que hablaran con sus hijos e hijas “para evitar que se suban con este individuo”.

Si bien la Policía recalca que no consta denuncia formal presentada por la familia, los agentes tienen previsto tomarle declaración en presencia de su madre, dentro del procedimiento habitual en este tipo de casos.

La Comisaría provincial ha hecho un llamamiento a la calma. Advierten que las autoridades están al tanto de lo sucedido y trabajan para esclarecer las circunstancias, con el objetivo de determinar si se trató de un malentendido o de una conducta que haya podido incurrir en un ilícito penal.

El incidente ha generado cierta preocupación entre las familias del centro educativo, aunque las fuentes consultadas insisten en la importancia de no difundir rumores y permitir que la investigación siga su curso.

Videojuegos on line, el nuevo ‘parque infantil’ de los depredadores sexuales en Málaga

Por otra parte, la Policía Nacional alertó hace unas semanas sobre el riesgo de abusos sexuales encubiertos en juegos on line infantiles. El investigador lo resumía con una frase que bien debiera grabar en su mente cualquier progenitor. "Hay plataformas de juegos on line que son un caldo de cultivo para los pederastas". El Grupo de Ciberdelincuencia de la Policía Nacional de Málaga advertía de los peligros a los que se ven sometidos los menores que hacen uso, sin control, de estas herramientas, donde los investigadores están detectando un incremento de adultos que se hacen pasar por jugadores para coaccionar a niños y obtener imágenes sexuales suyas o de amigos.

Si bien los casos de grooming investigados no son “alarmantes”, sí existe una recurrencia preocupante en niños. Las víctimas son cada vez más jóvenes, de incluso 6 años. El delito consiste en “el contacto con menores de 16 con fines sexuales”. En una entrevista con Málaga Hoy, uno de los investigadores de Ciberdelincuencia explicaba que existe una modalidad en la que el agresor intenta quedar con el menor, aunque son casos residuales; y otra, más frecuente, en la que busca obtener material sexual suyas. “Ese es ahora el peligro”, sentenciaba.

Las denuncias suelen llegar una vez los padres descubren ese contacto a través de distintas plataformas de chat. Pero la pregunta clave sigue siendo: ¿cómo llegó el adulto hasta el menor? En los juegos online no se pide documentación para registrarse y ello arrastra al doble engaño. “El adulto miente diciendo que es un niño, y el menor también, fingiendo que tiene más edad”, apuntaba el experto policial.

Una de las principales preocupaciones detectadas por la Policía no es sino lo habitual de que los menores falseen su edad al registrarse. Un gesto, aparentemente inofensivo, recuerda, que eleva el riesgo de exposición a contenidos y contactos inapropiados, además de limitar la eficacia de los filtros automáticos.

Uno de los casos más graves destapados recientemente en Málaga implicó a un depredador sexual que utilizaba el videojuego Fortnite para contactar con niños y que llegó a agredir sexualmente a un menor de siete años. Pero ha habido más investigaciones similares. En una de las últimas, un supuesto jugador prometía “gemas” virtuales a cambio de retos. Los agentes advierten de que muchos de estos juegos generan una necesidad ficticia y adictiva de conseguir monedas o recompensas, lo que puede empujar a los menores a aceptar condiciones abusivas para avanzar o mantener su estatus en la comunidad virtual.