Antonio Carlos Ortega se está convirtiendo en todo un experto en retos difíciles. Y es que desde que el equipo ascendiera a la máxima categoría del balonmano nacional, el técnico malagueño no ha hecho sino encajes de bolillos para conseguir alejar al Balonmano Antequera de los puestos de descenso.

En esas está ahora el técnico del conjunto de El Torcal, que esta tarde (20:45, Pabellón Fernando Argüelles) recibirá al Portland de San Antonio con la complicada misión de frenar al equipo navarro, situado en el tercer puesto de la tabla con 28 puntos, a cuatro del líder.

A una moral mermada por la derrota in extremis cosechada la pasada semana ante el Alcobendas se une la posibilidad de que el grupo pierda a uno de sus hombres más importantes, el pivote Zoran Lubej. El esloveno recibió una estricta descalificación en el último minuto del choque ante el conjunto madrileño, y el cuerpo técnico antequerano se encuentra a la espera de lo que dicte el Comité de Competición de la Federación Española. En caso de que no prospere el recurso solicitado por el Antequera, Ortega sólo tendrá que prescindir de uno de sus hombres de cara al choque de esta tarde.

En lo deportivo, el conjunto de El Torcal confía en que la participación de los navarros en varias competiciones simultáneas disminuya su ritmo de juego en la liga nacional, aunque la presencia de jugadores como Ruesga, Urdiales, Malmagro, Jorgensen o el guardameta sueco Svensson complica las cosas a los antequeranos. Aunque la excusa de poner más tierra de por medio con la zona roja de la tabla provocará una vez más que los pupilos de Ortega se crezcan ante su público.