La actividad deportiva en los despachos se reconduce desde hoy mismo. Las vacaciones de Fernando Sanz, aunque se haya ido pendiente del teléfono y el correo electrónico, se acaban y el madrileño vuelve a poner sus cinco sentidos en el día a día en los despachos. Urge que el madrileño y los nuevos dueños le den un achuchón grande a la planificación, puesto que dentro de sólo una semana el equipo pone rumbo a Benahavís para empezar la primera de sus tres concentraciones de verano. De lo mucho que hay por hacer estos días un nombre sobresale: el de Eliseu, que seguramente será el primero en firmar dados los avances para su contratación.

Tras pasarse varios días ilocalizable por haber ampliado sus vacaciones americanas yéndose a Las Bahamas unos días, tanto él como su agente, Carlos Gonçalves, están a órdenes para desplazarse desde Portugal hasta Málaga y ultimar el contrato en su retorno a Martiricos.

Lo que sí podría resultar novedoso es la fórmula escogida para sacarlo del Lazio. Y es que, a tenor de las fuentes próximas a la entidad romana consultadas ayer por este periódico, finalmente el luso podría llegar cedido con una opción de compra a favor del Málaga cifrada en 1,8 millones de euros. Al menos, ayer en Italia así lo daban por hecho a expensas de que el club lazial, que estos días está implicado de lleno en fichajes y salidas, lo hiciera oficial en las próximas horas.

Las novedades en torno a Eliseu no serán las únicas. Más allá de que se negociarán los finiquitos con los jugadores que no cuentan (Pere Martí, Miguel Ángel, Benachour), Jesualdo Ferreira también estará de vuelta por Málaga y se sentará con los actuales principales responsables (Abdullah Ghubn, Fernando Sanz, Sandro) y seguirá perfilando posibles incorporaciones para la plantilla y entablando contactos con jugadores pretendidos para acelerar su incorporación.

Las intenciones tanto del entrenador como de los dirigentes es que pudiera haber fichajes inmediatos para que el nuevo entrenador pueda trabajar en Benahavís con un grupo de jugadores amplio y parecido al dibujo final que quiere para la próxima temporada. Sin embargo, la situación podría no ser tan fácil, ya que a día de hoy el Málaga cuenta con 20 jugadores en su plantilla, un grupo amplio como para poder trabajar en la estadía, pero que seguramente vivirá muchas modificaciones a finales de julio, que es cuando Jesualdo Ferreira dejó entrever en su presentación que realizaría una posible criba acerca de los futbolistas con los que no querría contar en la Liga.

Si ya de por sí la situación de interinidad y transición del club es complicada a nivel general, el ámbito deportivo no es ajeno a ello, aunque el Málaga va a contrarreloj en su proyecto y tendrá que agilizar sus contrataciones para no llegar cojo al trabajo veraniego.