Goran y Zoran, los hermanos Dragic están de moda
Goran anotó en la noche del miércoles 31 puntos mientras que Zoran hizo 21 tantos en Polonia
Goran y Zoran. Zoran y Goran. Los Dragic están de moda. Zoran ha empezado la temporada a un gran nivel, mejorando el tiro a niveles que no se esperaban meses atrás. Goran es el hombre franquicia en los Suns de Phoenix. 9.197,57 kilómetros separan a los dos hermanos. Sin embargo, la distancia no hace que se olviden uno del otro.
El escolta del Unicaja está siendo, junto con Nik Caner-Medley, el mejor de los verdes en el primer tercio de la temporada. Ayer volvió a ser el máximo anotador del encuentro con 21 tantos en la cancha del Zielona Gora. Suple con gran acierto la baja anteriormente, y la puesta a punto de Toolson y de Urtasun.
Goran, por su parte, jugó en la madrugada del miércoles al jueves hora española en Phoenix contra los Blazers de Víctor Claver. El base esloveno fue el mejor de la jornada en la NBA finalizando con 31 puntos, 10 asistencias y 5 rebotes en la victoria que rompía una racha de 11 victorias consecutivas de los de Portland.
Zoran y Goran se hablan tras cada partido. Al finalizar sus respectivos encuentros, comentan sus actuaciones. No son pocas las veces que uno habla de la actuación del otro en alguna red social. Tras el triunfo del Unicaja ante el Zielona Gora, el hermano mayor escribió en la red social Twitter: "Orgulloso de mi hermano pequeño Zoran Dragic que ha hecho un gran partido. 21 puntos, 7 rebotes y 3 asistencias y consiguieron una victoria".
El del Unicaja intenta quedarse a ver los partidos de su hermano, pero la hora le obliga a perderse los encuentros. Sin embargo, está siempre pendiente a los resultados de Goran, uno de los mejores bases de la liga estadounidense y, junto a Bledsoe, está realizando una campaña buena en sus inicios.
El de los Suns promedia más de 17 puntos y casi 7 asistencias por encuentro, mientras que Zoran mete más de 12 tantos en la competición europea. A pesar de vivir actualmente cada uno en una parte del mundo, las tecnologías permiten a estos dos hermanos estar pendientes el uno del otro, tanto en la vida cotidiana como en la baloncestística.
Cuando ambos se encuentran en la selección, la sintonía se palpa. Se demostró el pasado verano en Eslovenia y son ya varios los años que llevan juntos.
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