Aunque nació en Barcelona, desde muy pequeño vive en Málaga. Criado en Huelin, Samuel Castillejo vive el sueño de todo futbolista de la tierra que ya desde infantiles ha lucido los colores blanquiazules. El Málaga y una de las perlas de su cantera han atado su futuro a corto y medio plazo. Ayer fue presentado el conocido acuerdo de renovación hasta junio de 2018 y resultó un día feliz para club, jugador y también afición, ilusionada por los regates y los goles de un Castillejo que lleva atrayendo focos desde que tenía 15 años. "Siempre creí mucho en mí, y hasta ahora lo he podido demostrar. Ojalá siga haciéndolo", fue la declaración de intenciones de un satisfecho Castillejo en su comparecencia en La Rosaleda.

Su ampliación de contrato ha sido efectuada bajo los nuevos parámetros económicos del club. En pleno vértigo de la era Al-Thani, el vicepresidente Abdullah Ghubn blindó a Castillejo con unos emolumentos que no se ajustaban a los nuevos límites salariales. El director deportivo Mario Husillos agradeció públicamente el gesto de Castillejo. "Lo fácil habría sido quedarse con ese contrato", reconoció Husillos, que apuntó: "Pero siempre quedó claro que quiso ser futbolista. Él siempre estuvo en la realidad. Y me dijo: 'Mario, vamos a tener que llegar a un acuerdo'. Este acuerdo es bueno para todos". La cláusula de rescisión será de 20 millones de euros.

Castillejo, al que en la plantilla llaman cariñosamente Casti o Fideo, también agradeció la apuesta que hace el Málaga por su garantizar su continuidad. También apuesta por él Javi Gracia, que ha demostrado que, pese a ser un recién llegado del Atlético Malagueño, no es un figurante en el plantel. Aunque su rol más frecuente ha sido de revulsivo, ya ha sido dos veces titular, ante Barça y Córdoba, y con éxito. "Estoy muy contento de poder participar en la primera plantilla del equipo de mi tierra y no podría hablar de alguien en concreto que me ha ayudado porque me dejaría a algunos. Solamente quiero darle las gracias a todos los que han estado conmigo desde que empecé", apuntó Castillejo, satisfecho por formar parte de un Málaga en el que La Academia tiene un importante y creciente papel: "Están Ernesto, Kuki... Para toda la gente aquí y para el club es una satisfacción ver un Málaga con tantos malagueños y canteranos".

Castillejo se pone a disposición de Gracia para jugar "en cualquier posición del centro del campo para arriba" y no se pone metas: "No debo de pensar más allá, sólo en mi contrato, en el Málaga, en todo lo que me queda por vivir que espero que sea mucho y muy bonito. Es una experiencia única para cualquier canterano ser de aquí y jugar, lo he podido alcanzar y ahora hay que disfrutar de esto".

No se presiona acerca de si tendrá un nuevo papel en el equipo de Gracia. "Espero disfrutar de los máximos minutos posibles y estar a disposición del míster. Él decide, nosotros debemos aceptarlo. El míster me está ayudando mucho y quiero darle las gracias. Los minutos él sabrá mejor que nadie cómo dármelos", señaló Casti.

De 19 años, no nota cambios sustanciales en su día a día a pesar de que está siendo una de las agradables sorpresas de la Liga BBVA. "En lo personal estoy viviendo lo mismo. Salgo más en los medios, pero sigo siendo la misma persona, tengo la misma vida, soy el mismo de antes y bueno, es un gran cambio en lo deportivo, pero lo estoy llevando bastante bien", afirmó el malagueño, que sigue viviendo con su familia. "Y espero seguir mucho tiempo con ellos [risas]", dijo tras la rueda de prensa en Málaga FM-Radio Marca.

Castillejo, en esta entrevista, quiso destacar que no todo ha sido un camino de rosas en su formación en las categorías inferiores en el Málaga. El verano del pasado año estuvo a punto de salir rumbo al Zaragoza. "Estuve con un pie fuera, estaba todo hablado, hasta que llegó el míster Salva Ballesta y me convenció con sus palabras. También he sufrido, no es fácil", comentó.

La ampliación de Castillejo no es cuestión baladí para el club. En el acto estuvieron todos los consejeros consultivos, el citado Husillos, el director general Vicente Casado y su adjunto Manuel Novo. Antonio Benítez se mostró muy emocionado: "Tiene una gran virtud, y es que sabe escuchar e interpretar lo que le he dicho, y por eso tenemos una cosa especial. Sé que está bien dirigido por padre y allegados. Que siga con pies en el suelo".