Se avecina una tempestad en la barriada malagueña de Tiro de Pichón. Su club de fútbol, una de las principales canteras de la provincia, está inmerso en una crisis institucional que en la tarde de ayer dio pie a la dimisión de todos los entrenadores de la entidad y la manifestación de jugadores, socios y vecinos.

La protesta llega desde varios trabajadores del club que denuncian irregularidades en las cuentas del Tiro Pichón. Y es que el equipo senior estuvo cerca de no participar en División de Honor tras su ascenso por motivos económicos, según su directiva, algo con lo que discrepan desde dentro. "En las arcas había un buen dinero que se estaba guardando para ascensos, no es posible que haya problemas con 500 niños pagando cuotas", destaca Juan Oñate, ex coordinador del conjunto malagueño. Cuotas que se han subido de 10 a 20 euros, lo que se añade a otros aumentos que han hecho poner el grito en el cielo a los socios.

La directiva presentó ayer sus cuentas; las cuales, destaca Oñate, no convencen. Esto, unido a una trifulca sucedida el pasado viernes entre el presidente, José Rodríguez, y un miembro del club, ha provocado que socios y empleados recogiesen cientos de firmas para conseguir la dimisión de la directiva.

Este viernes será determinante, ya que habrá una junta extraordinaria con el único punto de exigir la marcha de sus dirigentes. "Es la única forma de acabar con esta parálisis", señalan.