El australiano Mark Webber acusó a su compañero de Red Bull, el alemán Sebastian Vettel, de no hacer caso a las órdenes de equipo en el Gran Premio de Fórmula 1 de Malasia. "Podría haber ganado, pero el equipo tomó una decisión y bajé el ritmo. Y al final Sebastian tomó sus propias decisiones. Sabemos que él es un piloto muy luchador", lanzó Webber en el podio tras ser segundo en Sepang por detrás de Vettel, que escaló al primer puesto del Mundial. El alemán, triple campeón del mundo, adelantó a Webber en las últimas vueltas del segundo Gran Premio del año tras una dura lucha entre ambos pilotos, que a punto estuvieron en varias ocasiones de  chocar.  

Vettel y Webber apenas cruzaron palabras antes de subir al podio. Visiblemente enfadado, el australiano le recriminó primero con la mirada y después con palabras. El alemán, en cambio, apostó por hablarlo de forma interna. "Si hay algo que decir lo tenemos que decir internamente. Pero lo hemos disfrutado los dos", dijo Vettel. "Obviamente hemos estado muy cerca, creo que no hubo demasiado espacio para ninguno. Fue una lucha muy cerrada. He disfrutado de esa lucha y he conseguido ganarla".  

La tensión dentro del equipo es indisimulable y, en plena carrera, la radio de Red Bull lo dejaba claro. "Mark es demasiado lento, sáquenlo de mi camino", espetó Vettel, a quien el ingeniero de carrera Guillaume Rocquelin pidió paciencia. El alemán adelantó finalmente al australiano en una arriesgada maniobra en la vuelta 46. "Eso es una insensatez", dijo vía radio el jefe del equipo, Christian Horner.