Después de un mal comienzo de temporada, el alemán Sebastián Vettel lanzó un aviso en Bahréin al lograr su primera pole position del año en la Fórmula 1. El campeón mundial, que hizo un tiempo de 1:32,422 minutos en la clasificación, estará acompañado este domingo en la primera línea del Gran Premio por el británico Lewis Hamilton, que fue sólo 0,092 segundos más lento. Tras cosechar resultados modestos en las tres primeras citas del Mundial, Red Bull recordó al equipo dominante de la última temporada al colocar al australiano Mark Webber en la tercera posición de la parrilla de salida. Junto a él, en cuarta posición, estará el compañero de Hamilton en McLaren, el británico Jenson Button.

Menos brillante estuvo el equipo Mercedes, que vio cómo Nico Rosberg, ganador la pasada semana en China, tenía que conformarse con la quinta plaza. Peor le fue a su compañero y compatriota, Michael Schumacher, que quedó eliminado en la Q1 y partirá del lugar 17. El español Fernando Alonso, de Ferrari, saldrá noveno, después de que en la última tanda de clasificación decidiera preservar sus neumáticos para la prueba de mañana.

Vettel logró la pole número 31 de su carrera, pero aún no ha logrado subirse a lo más alto del podio esta temporada. "Esto sienta fantástico", dijo el alemán tras su actuación en el circuito de Sakhir. "Este fue el primer paso en la dirección correcta", añadió. "El coche se siente mucho mejor. Estoy muy contento", agregó Vettel, que tras un discreto arranque de año, es quinto en la clasificación de pilotos. El alemán hizo modificaciones en la parte trasera de su bólido y renunció al viejo tubo de escape. "Los chicos han trabajado extremadamente duro. No sé cómo lo hacen. Duermen cada noche sólo dos o tres horas y aún así tienen toda la energía", alabó el bicampeón a su equipo. "El resultado le da a uno mucha energía, porque se ve que todo el trabajo merece la pena".

Hamilton también se mostró satisfecho de su McLaren. "Fue probablemente una de mis mejores sesiones de clasificación. Estoy feliz por eso", dijo el británico. El ambiente en Mercedes, por el contrario, era de desilusión. Rosberg parecía tener el viento en la espalda tras su victoria en China y fue el más rápido en los entrenamientos libres del viernes y el sábado por la mañana. En el momento clave de la clasificación, sin embargo, el piloto de 26 años no alcanzó el máximo de revoluciones. "Al final no fui lo suficientemente rápido", admitió el alemán, que no obstante pudo reservar un juego de neumáticos para la carrera de mañana. "Esa era nuestra estrategia. Por eso estoy bastante contento", aseguró Rosberg.

Lo mismo pensó Alonso, que ni siquiera hizo una vuelta válida en la última sesión de clasificación. "Ahora tenemos la oportunidad de elegir los neumáticos", advirtió el bicampeón mundial español. "La carrera va a ser bastante dura en cuanto a degradación de neumáticos". El mexicano Sergio Pérez, de Sauber, partirá desde la octava plaza tras hacer un tiempo de 1:33,394 minutos. El venezolano Pastor Maldonado, de Williams, saldrá desde la vigésimo segunda plaza tras ser sancionado con cinco posiciones por cambio de motor.

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