"Poco turismo y playas vacías", este es el pueblo costero de Málaga perfecto para acabar el verano

"Este arenal es sin duda uno de los secretos mejor guardados de toda la Costa del Sol", así definen la gran playa de Algarrobo, del municipio del mismo nombre, uno de los pueblosdeMálaga menos masificados durante los meses de verano y que en septiembre alcanza el sinónimo de paz y tranquilidad para disfrutar de los últimos suspiros de los días de calor. La revista 20minutos lo ha incluido en una serie de destinos tranquilos y poco masificados perfectos para este mes donde damos los últimos coletazos al verano.

"Siempre con el mar como principal acompañante, estas localidades son perfectas para recargar pilas y olvidarse durante unos días de la rutina", señalan sobre los pueblos andaluces perfectos para encontrar la paz, poco masificados e ideales para desconectar, entre los que está Algarrobo así como otros como Isleta del Moro (Almería), Salobreña (Granada) y ElRompido (Huelva).

Sobre Algarrobo señalan que, sobre su ubicación, "entre el Mediterráneo y la montaña", es un lugar "ideal para relajarse"." La blancura de sus casas contrasta con el azul de las aguas del mar y los tonos dorados de su arena, lo que crea una estampa idílica", piropean sobre Algarrobo, deteniéndose en su costa: "Su espectacular playa de 800 metros apenas recibe turistas en las semanas de verano, y además es una de las que puede presumir de tener bandera azul. Este arenal es sin duda uno de los secretos mejor guardados de toda la Costa del Sol, y es que los turistas que no quieran estar rodeados de mucha gente no tienen que renunciar a visitar esta parte tan fantástica del litoral peninsular".

Algarrobo, un pueblo de herencia morisca con vistas al Mediterráneo

El casco urbano de Algarrobo conserva la estructura típica de los pueblos de interior de la Axarquía: calles estrechas, casas encaladas y rincones que evocan su pasado árabe. Desde las colinas en las que se asienta se obtienen vistas panorámicas del Mediterráneo, convirtiendo al municipio en un auténtico balcón hacia el mar.

Su ubicación permite disfrutar de dos entornos diferenciados. Por un lado, el núcleo histórico, donde se concentran los principales monumentos y restos arqueológicos; por otro, su franja costera, que alberga playas tranquilas y un paseo marítimo con restaurantes y marisquerías de reconocido prestigio.

Qué ver en Algarrobo: monumentos y yacimientos arqueológicos

Algarrobo atesora un notable patrimonio histórico. La iglesia de Santa Ana, construida en el siglo XVII, es el monumento religioso más importante del municipio. Destacan sus artesonados de madera y el camarín lateral, incorporado en el siglo XVIII, así como su campanario, uno de los elementos más característicos del templo. El municipio cuenta también con dos ermitas de gran valor simbólico: la de la Virgen de las Angustias y la de San Sebastián. Esta última se ubica en la Loma del Elegido, un lugar elevado desde el que se aprecian hermosas vistas del entorno.

Uno de los yacimientos arqueológicos más relevantes del Mediterráneo occidental se encuentra en Algarrobo: la Necrópolis de Trayamar. Se trata de un complejo de tumbas paleopúnicas vinculadas a una antigua factoría fenicia del siglo VII a.C. Los objetos hallados en este enclave pueden contemplarse en el Museo Arqueológico Provincial de Málaga. Además, en el Morro de la Mezquitilla se han documentado restos de la Edad de Bronce, así como de época romana y púnica. En la franja costera se conservan dos torres vigías que recuerdan la función defensiva de este litoral; una de ellas es de origen árabe y la otra data del siglo XVI.

Playas tranquilas y espacios naturales

Algarrobo combina el encanto de su núcleo interior con la tranquilidad de sus playas. El término municipal llega hasta el mar, que baña dos arenales de arena oscura: la playa de Algarrobo Costa y la playa de la Mezquitilla. Ambas cuentan con servicios y un paseo marítimo que concentra la oferta gastronómica local.

El municipio dispone además de espacios verdes y áreas de esparcimiento, como los parques de la Vega y del Pozo de los Deseos, y los jardines de la ermita. Para quienes buscan naturaleza, varias rutas senderistas recorren los parajes más atractivos de la zona, entre ellos los parques fluviales del Río Algarrobo y Los Villares, los Lagos o el Arroyo de los Perales.