El pueblo de Málaga donde el invierno se vive entre nieve, pinsapos y platos de cuchara

En el entorno del Parque Natural de la Sierra de las Nieves, hay pueblos con muchos misticismo, con mucha carisma y magia como es el caso de Yunquera, uno de los enclaves más representativos del invierno en la provincia de Málaga. Este municipio ofrece durante los meses más fríos una combinación singular de naturaleza, patrimonio histórico y gastronomía tradicional, configurando un paisaje donde la nieve, los bosques de pinsapos y los guisos de cuchara forman parte del día a día.

Integrado en la Reserva de la Biosfera de la Sierra de las Nieves, Yunquera se presenta como una de las principales puertas de acceso a este espacio natural protegido, reconocido por su alto valor ecológico y paisajístico. El invierno aporta un carácter especial al entorno, con temperaturas más bajas, cielos limpios y, en muchas ocasiones, cumbres cubiertas de nieve que transforman el paisaje serrano.

La naturaleza es uno de los grandes protagonistas de Yunquera. El municipio se encuentra rodeado por extensos bosques de pinsapos, una especie de abeto endémico que encuentra en la Sierra de las Nieves uno de sus principales refugios. Estos bosques, únicos en Europa, adquieren durante el invierno una atmósfera especialmente llamativa, con la presencia de la nieve en las zonas más altas y un contraste visual que define el paisaje de la Serranía de Ronda.

Entre las rutas más conocidas del entorno destaca la ruta circular que une el Puerto Saucillo y el Puerto Bellina. Se trata de un recorrido que permite adentrarse en el corazón del parque natural y disfrutar de vistas panorámicas, senderos entre pinsapares y una inmersión completa en un ecosistema de gran valor ambiental. Durante el invierno, estas rutas se desarrollan en un ambiente marcado por el aire limpio y las bajas temperaturas, elementos característicos de esta época del año en Yunquera.

La altitud del municipio y la escasa contaminación lumínica convierten además a Yunquera en un enclave destacado para la observación del cielo nocturno, especialmente en noches despejadas, habituales durante el invierno serrano.

Un patrimonio histórico ligado a la Serranía

La historia de Yunquera se remonta a tiempos prehistóricos, aunque fue durante la época romana cuando el asentamiento adquirió mayor relevancia bajo el nombre de Juncaria, en alusión a los juncos presentes en los prados de la zona. Posteriormente, durante el periodo musulmán, el aprovechamiento del agua permitió el desarrollo de sistemas de riego y la construcción de una fortaleza defensiva, de la que aún se conservan vestigios.

El patrimonio arquitectónico de Yunquera refleja este pasado histórico. La Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Encarnación, conocida popularmente como la “Catedral de la Serranía”, es uno de los elementos más destacados del conjunto urbano. Construida en el siglo XVI, su torre-campanario de tejas azules se ha convertido en una de las imágenes más reconocibles del municipio. En su interior alberga un importante patrimonio religioso que forma parte de la identidad local.

Otros puntos de interés patrimonial son la Torre Vigía, levantada durante la Guerra de la Independencia, y las ermitas de Nuestra Señora de Porticate y de la Cruz del Pobre, pequeñas construcciones que aportan valor histórico y arquitectónico al municipio.

La gastronomía de invierno en Yunquera

La cocina tradicional de Yunquera está profundamente ligada a su entorno rural y agrícola. Durante el invierno, la gastronomía local adquiere especial protagonismo gracias a platos contundentes y reconfortantes, elaborados con productos de la tierra y recetas transmitidas de generación en generación.

Entre los platos más representativos se encuentran la olla de berza, la caldereta de cabrito y el malcocinao, un guiso elaborado a base de garbanzos, tocino, chorizo y morcilla, que resume la esencia de la cocina serrana. Estas elaboraciones forman parte del recetario tradicional del municipio y están estrechamente asociadas a los meses más fríos del año.

En el apartado dulce, Yunquera mantiene una repostería ligada a la tradición. Los buñuelos y las empanadillas de cabello de ángel destacan como postres habituales, especialmente en fechas señaladas del calendario local.

Tradiciones y productos de temporada

El otoño y el inicio del invierno marcan también el calendario festivo de Yunquera, con eventos vinculados a los productos de temporada. A finales de octubre se celebra la Feria del Vino y la Castaña, una cita que pone en valor dos de los sabores más característicos del entorno serrano y que sirve como antesala del invierno en el municipio.

Así, Yunquera se presenta como un reflejo fiel del invierno en el interior de la provincia de Málaga, donde la naturaleza de la Sierra de las Nieves, el legado histórico y la gastronomía tradicional conviven en un entorno marcado por la tranquilidad, el paisaje de montaña y las costumbres serranas.