Este pueblo de Málaga te teletransporta al pasado con su mezcla de culturas y esplendor, sus calles son de película y su entorno mágico

En el corazón del Valle del Genal, al sur de la Serranía de Ronda, se encuentra Benarrabá, un pequeño pueblo de Málaga cuyo nombre, procedente del árabe Bann Rabbah, Hijos de Rabbah, es una invitación directa a sumergirse en la herencia andalusí. Sus calles estrechas, sus fuentes y su trazado urbano recuerdan a la época islámica, cuando este enclave fue un punto estratégico en la defensa del valle. Situado entre ríos y montes, este pueblo combina historia, arquitectura y naturaleza en un entorno de gran diversidad paisajística, un pueblo que además está integrado en la Red Nacional de Pueblos Acogedores.

El origen de Benarrabá se remonta a la época musulmana, cuando los descendientes de la tribu bereber de Bann Rabbah construyeron una fortaleza en el monte Porón para dominar las vistas hacia Gaucín, Algatocín, Genalguacil y Jubrique. Tras la conquista cristiana pasó a manos de la Casa de Medina Sidonia, un linaje que dejó huella en la memoria local. En 1636, el noveno duque atravesó el municipio con una comitiva que quedó registrada como un acontecimiento notable en su historia.

Este pasado se refleja hoy en su urbanismo: acequias, pozos y fuentes aparecen por doquier, evocando el simbolismo del agua como elemento purificador en la cultura islámica. Las calles, con fuertes pendientes que alcanzan desniveles del 70%, conservan rincones de aire medieval, mientras que espacios como la Plaza de la Veracruz aportan amplitud al entramado urbano.

Monumentos destacados

El monumento más sobresaliente de Benarrabá es la iglesia parroquial de San Sebastián, erigida a comienzos del siglo XVIII. Su interior, distribuido en tres naves separadas por arcos de medio punto, alberga yeserías policromadas con escenas de la Asunción y del martirio de San Sebastián. En su fachada principal se distingue un arco lobulado que termina en triángulo y, en la torre, un tejado recubierto de cerámica azul vidriada que se ha convertido en uno de los rasgos más reconocibles del templo.

La localidad cuenta además con la ermita del Cristo de la Vera Cruz, construida en el siglo XVII y reformada posteriormente. Este edificio, de nave única, conserva un retablo de madera policromada del XVIII y presenta en su fachada una espadaña de un solo hueco. Paseando por las calles Saucal, Baja, Estación y Sol se descubren edificios del siglo XVIII con fachadas dieciochescas, balaustradas de forja y ventanales de gran tamaño. Entre ellos destaca la Casa Lola, una construcción original con símbolos y detalles decorativos, algunos de tradición celta, que han salido a la luz tras retirar capas de cal.

Naturaleza y entorno paisajístico

Benarrabá se asienta sobre un territorio montañoso bañado por los ríos Guadiaro y Genal. Sus paisajes van desde las riberas frondosas del Genal, con zonas de baño como Los Lobos, Los Pepes, El Reventón o La Peña, hasta bosques mediterráneos de encinas, alcornoques y quejigos. Miradores como los del monte Porón, El Peñón o la sierra de Frontales ofrecen vistas panorámicas sobre el valle.

Uno de los recursos naturales más singulares es el Cañón de las Buitreras, declarado Monumento Natural en 2003. Este desfiladero del río Guadiaro está formado por dos paredes rocosas de más de 100 metros de profundidad unidas por el Puente de los Alemanes, del que hablamos recientemente. En sus huecos anida el buitre leonado, dando nombre al paraje y convirtiéndolo en un enclave único para la observación de aves y para la práctica de la escalada.

Tradición y festividades

Benarrabá mantiene vivas sus costumbres a través de un calendario festivo que refleja su identidad. Cada 5 de enero, niños y jóvenes del municipio representan un Auto Sacramental que recrea el viaje de los Reyes Magos, con villancicos y escenas itinerantes por distintos rincones del pueblo. Las festividades de San Sebastián (20 de enero) y San Miguel (29 de septiembre) son las más importantes del año, mientras que en verano se celebra la romería de San Juan a la ribera del Genal, la feria de agosto y una intensa semana cultural.

De hecho, este mismo fin de semana, hasta el lunes 29, celebran su Feria de San Miguel con una extensa programación.