La EMT amplía cinco líneas de la zona este y norte para llevar a los viajeros hasta El Perchel
Los cambios impulsados por el Consistorio se producen antes de negociarse con la Junta la adaptación de los trazados al Metro
El Ayuntamiento de Málaga vuelve a mover las líneas de la Empresa Malagueña de Transportes para, según su criterio, mejorar la intermodalidad de los trazados del autobús con el Metro, una vez éste entre en funcionamiento. El equipo de gobierno del PP comunicó ayer que desde este sábado se ampliará el recorrido de cinco ramales (32, Limonar; 33, Cerrado de Calderón; 34, Pedregalejo; 35, Gibralfaro, y 37, Monte Dorado) en el objetivo de que tengan un mejor acceso a la zona del Perchel y a los centros comerciales próximos, caso del Centro Comercial Larios y El Corte Inglés.
La medida se adopta antes de que los técnicos del Consistorio vuelvan a sentarse a la mesa con los de la Consejería de Fomento para determinar el modo en que se complementan ambos medios de transporte para que no compita uno con el otro. No obstante, desde la Casona del Parque se precisaba ayer que la propuesta de acercamiento de estas líneas del este y norte de la ciudad fue comunicada a la Administración regional en la última comisión de coordinación del Metro.
El comportamiento se repite respecto a lo ocurrido a principios del pasado mes de febrero, cuando el Ejecutivo local informó de que iba a extender el itinerario de las líneas 11 (El Palo) y 3 (Puerta Blanca), para que los usuarios de la primera puedan desplazarse de forma directa desde la zona este hasta Teatinos y, los de la segunda, desde Carretera de Cádiz hasta El Palo.
Según precisaron desde el equipo de gobierno, la acción se enmarca dentro de la remodelación de la red que la empresa de autobuses está llevando a cabo antes de la puesta en marcha del ferrocarril urbano, que en su primera fase se espera para finales de este año. Las líneas que pasan a mejorar el recorrido mueven al año alrededor de dos millones de viajeros, que con estas modificaciones podrán llegar hasta la Avenida de Andalucía y acceder a los servicios, instalaciones y entornos antes mencionados. En el marco de esta planificación, las nuevas cabeceras de los ramales quedarán instaladas en lateral sur de Avenida de Andalucía, delante de la Casa Hermandad de la Expiración.
Al tiempo, estos cinco recorridos mantendrán paradas de paso en la Alameda Principal: en dirección oeste, en la esquina de calle Larios; en dirección Este, las líneas que se dirigen a ese distrito lo harán en una nueva parada delante del edificio de la Equitativa. Por su parte, la línea 37 mantendrá su parada habitual en la Alameda, aunque a partir del sábado sólo de paso. Esta acción permite la supresión de cinco cabeceras de línea en la Alameda Principal, con la consiguiente reducción del número de autobuses estacionados o en espera en este enclave.
Este paso adelante pilló por sorpresa a los responsables autonómicos, que recordaron que precisamente cómo ha de adaptarse la red de autobuses a la entrada en funcionamiento del Metro. Un asunto que, según se acordó en el último encuentro de los socios públicos ha de ser objeto de conversaciones en las próximas semanas.
A juicio de Fomento, es preciso establecer una coordinación óptima y eficiente entre ambos medios de transporte, al objeto de generar sinergias y evitar solapamientos. "El bus urbano y el Metro deben complementarse para sumar fuerzas, ampliar la cobertura y dar a la inversión en el metropolitano la máxima eficiencia, jamás competir", dijo el director general de Movilidad de la Junta de Andalucía, José Luis Ordóñez.
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