Los expertos en economía política Juan Torres López y Vicens Navarro analizaron ayer la situación de crisis financiera actual y el neoliberalismo en la segunda jornada del curso sobre Sindicalismo de clase en los inicios del siglo XXI, en el marco de los cursos de verano de la UNIA Málaga que este año acoge el Albergue Inturjoven de la Música, ubicado en Torremolinos. En este encuentro, que concluye hoy, los profesores reflexionaron sobre diversas cuestiones relacionadas con el modelo productivo y económico español.

Torres analizó la situación social y política que se está viviendo actualmente, y consideró que es "el resultado de procesos complejos que tienen que ver con los cambios en el aparato productivo y la regulación macroeconómica, pero también en el comportamiento de los sujetos sociales". Para Torres, la "única" forma de hacer frente a dicha situación "pasa por cambiar los modos de producir, de consumir, de gobernar la economía, pero también el propio comportamiento de la sociedad y de las personas".

Sobre el neoliberalismo como corriente político-económica imperante, Torres considera que "la lucha contra esta doctrina económica es un combate frontal, complejo y global en todos los ámbitos" y recordó que "las clases trabajadoras son las principales cómplices, e incluso votantes, de los partidos de derechas; el neoliberalismo las ha conquistado".

Navarro, por su parte, aseguró que "el euro no está en crisis y no hay ningún peligro de que desaparezca" y que "si lo hiciese, sería por causas políticas". Asimismo, matizó que los países periféricos como Portugal, Grecia, España e Irlanda "son los que están en una situación más crítica" y que en esto "ha tenido mucho que ver el hecho de que se trate de Estados represivos, poco redistributivos y escasamente sociales".

Navarro aprovechó la ocasión para pronunciarse sobre los recortes que el Gobierno ha ido poniendo en marcha. En ese sentido, defendió que "para cada recorte hay una alternativa" y explicó que "en lugar de recortar en sanidad, educación o asuntos sociales se podrían haber obtenido esos ingresos de otra forma, como mantener el Impuesto de Patrimonio.