Alto y claro
José Antonio Carrizosa
¿Merece la pena?
Desde que cerró en enero de 2022 el histórico Café Central en Málaga, su local en la Plaza de la Constitución ha estado vacío hasta hace poco. La marca sueca John Scott's ocupó este espacio y ahora cumple tres meses desde su apertura en la capital.
En un principio, la ciudadanía no acogió con buena cara la instalación de un pub sueco en el local de uno de los cafés más importantes para la capital. La huella del Café Central sigue presente entre los malagueños, que continúan entrando en busca de un café y churros.
Sin embargo, su gerente, Owen Smith, afirma que el primer mes fue "muy bueno, tranquilo", puesto que estuvieron a la espera del permiso para utilizar la terraza. Ahora, con esta instalada, comienzan a ver los beneficios de este emblemático lugar.
En John Scott's son conscientes de que es necesario que pase más tiempo hasta que finalmente logren hacerse una imagen en la ciudad. Owen asegura con contundencia que no quieren ser un pub para el turismo de despedidas de solteros o "el típico pub inglés con grupos de chicos sin camiseta".
"Queremos gente tranquila", comenta Owen, "si hay gente que comienza a gritar mucho y molestar, los sacamos. Somos un pub, pero más tranquilos. He leído los comentarios sobre nosotros en los periódicos y redes sociales, pero no somos lo que piensan de nosotros".
Quien acude a este pub busca una gran variedad de buenas cervezas, sidras, copas, música de los 80 y los 90, y comida que no se podrá encontrar en ningún otro restaurante en la ciudad. La identidad es lo que más caracteriza a este grupo, pero todavía está por descubrir si es capaz de fundirse con la marcada personalidad de los ciudadanos malacitanos.
A pesar de ello, sostienen que gran parte de su público es local, aunque el calor es el mayor aliciente para acoger a turistas que llegan a la plaza bajo un intenso sol y necesitan pronto algo fresco con lo que mitigar la sed.
Aunque la marca sueca presenta una gran variedad de cervezas y sidras de elaboración propia, así como un espacio para la relajación, las costumbres de los malagueños no cambian. "Sentarse en la barra y tomarse una caña rápido, pagar e irse", un comportamiento diferente al que experimentan en su otro local en Puerto Banús, donde siempre se prefiere el servicio en la mesa para disfrutar de la experiencia.
Sus cervezas Koppalberg, siempre en grifo, comienzan a atraer a los amantes cerveceros, aunque comentan que también tienen cervezas españolas porque es "a lo que están acostumbrados" sus clientes locales. En base a estas costumbres, pronto comenzarán a servir café para aquellos a quienes la rutina les lleve hasta el número 11 de la Plaza de la Constitución.
También quieren ganarse una reputación a través de la comida típica de Suecia. Aseguran que sus albóndigas suecas son únicas, ya que la salsa de tomate que las acompañan tienen un sabor diferente al resto. "El tomate, la mantequilla, la leche y la harina hacen que sean diferentes a todas las de Málaga".
Su gerente admite sentir la presión impuesta sobre John Scott's por el pasado de las paredes en las que se han instalado, pero confía en que la imagen y los valores del pub consigan formar una relación de confianza con los vecinos.
"Entiendo que venga gente que no quiere tomar nada, solo para mirar el cambio del interior. Hay mucha gente que tiene 50 años y estaba aquí con 10 comiendo sus churros, y quiere ver cómo está ahora el sitio. Hay mucha gente así".
El Café Central fue uno de los primeros locales del centro de Málaga que tuvo que echar el cierre por la descomunal subida de los precios del alquiler. Cien años de historia en Málaga no han sido suficientes para sobrellevar el alza de las rentas.
Meses después, la capital de la Costa del Sol ha tenido que ver cerrar a otros comercios como Bershka, que llevaba más de dos décadas en su establecimiento de calle Larios; o más recientemente Benetton, que también ha dejado de formar parte del centro de la ciudad.
La situación que está viviendo actualmente Málaga deja una incógnita para sus ciudadanos: ¿hay espacio para lo malagueño en Málaga? ¿Debemos ser siempre una ciudad que acoge al extranjero?
John Scott’s ha cumplido su segundo mes en Málaga, y aunque están luchando por hacerse un hueco en la ciudad y convencer de su imagen a sus vecinos, todavía tendrá que demostrar mucho más hasta formar parte de ella.
Temas relacionados
También te puede interesar
Lo último
Alto y claro
José Antonio Carrizosa
¿Merece la pena?
Bloguero de arrabal
Ultraoceánicos
El salón de los espejos
Stella Benot
La Transición andaluza
2 Comentarios