La crisis del ruido en los colegios e institutos públicos que son sede de equipos de baloncesto comenzó con las quejas vecinales contra el CEIP Lex Flavia Malacitana, en el barrio de El Ejido. Aunque el Ayuntamiento y la Junta de Andalucía firmaron a finales de 2017 un convenio que desbloqueó la situación que había dejado sin lugar de entrenamiento a algunos clubes, el problema del ruido seguía sin solución. Para acabar con las molestias vecinales, el Ayuntamiento de Málaga ha sacado a licitación el proyecto de acondicionamiento acústico de la pista deportiva del patio de recreo del centro, ya cubierta. Precisamente ese cerramiento hacía un efecto rebote que incrementaba el sonido.

Con un presupuesto estimado para la actuación de 148.852 euros, el proyecto contempla la ejecución de tres actuaciones, según explicó ayer el Consistorio en un comunicado. Una de ellas es la instalación de una pantalla de aislamiento acústico de 5 metros de altura desde la cota de techo, rellena de un material absorbente e los dos laterales de la pista cubierta que se encuentran más cercanos a las viviendas afectadas.

También se ha proyectado la instalación de otra barrera acústica de cuatro metros sobre el peto de bloque de hormigón del colegio que divide el centro escolar del vial público. Y por último, se pretende colocar paneles absorbentes acústicos fabricados de una combinación de espuma fonoabsorbente en el techo de la estructura metálica del recinto deportivo que eviten la reverberación de los sonidos producidos en la pista y que producía “el efecto tambor” que ampliaba dichos sonidos y generaba molestias.

Se estima que el plazo de ejecución de estos trabajos será de tres meses. En octubre del pasado año, el club Adesa tuvo que dejar de usar estas instalaciones para entrenar y 90 niños se quedaron sin entrenar. También peligró la actividad en el IES Jardines de Puerta Oscura y otros siete centros en los que entrenaban nueve clubes de baloncesto.