La Policía detiene a varios españoles y extranjeros por el rapto del empresario

Expertos de las unidades de secuestros de la Policía Nacional de Málaga y Madrid han detenido en las últimas horas un nutrido grupo de extranjeros y españoles vinculados con el rapto del empresario de Marbella Fernando Moreno, que fue hallado sin vida en una caseta el jueves pasado en las proximidades del municipio de Istán.

Ayer tarde aún se estaban realizando detenciones y registros en las viviendas de los arrestados en busca de pruebas que les vinculen con el secuestro del empresario, de 76 años de edad. La mayor parte de los detenidos han sido localizados en la Costa del Sol.

No obstante, tanto la Policía Nacional como el subdelegado del Gobierno, Hilario López Luna, han declinado pronunciarse sobre esta actuación policial con el argumento de que la operación, que comenzó el lunes por la noche, todavía estaba abierta a última hora de la tarde de ayer, momento en el que se practicaban registros domiciliarios y algunos arrestos.

No obstante, la Cadena Ser informó ayer de que se habían llevado a cabo ocho detenciones y que entre los sospechosos figuraban varios ciudadanos colombianos.

El subdelegado señaló que los arrestos se han producido "en cadena" a medida que se desarrollaba la investigación policial y los primeros detenidos prestaban declaración.

Además, el jefe superior de Policía de Andalucía Oriental, Pedro Mélida, precisó ayer por la mañana que se había comenzado a tomar declaración a los detenidos para conocer su grado de implicación en los hechos. En este sentido destacó el "intenso" trabajo efectuado por los agentes desde que se produjera "el desgraciado delito", motivo por el que felicitó a los investigadores del caso, al considerar que el resultado "va a ser concluyente".

La familia del empresario Fernando Moreno denunció su desaparición a las 12:00 horas del pasado 21 de enero, después de que un hombre con acento suramericano les llamara y les exigiera dos millones de euros por su liberación.

En conversaciones posteriores con la familia, los captores rebajaron esta cantidad hasta los 600.000 euros hasta que en un último contacto con la familia, a las tres de la tarde de ese mismo día, indicaran que el empresario se encontraba en una caseta cerca de una represa. En esa ocasión los secuestradores ya no exigieron ninguna cantidad de dinero.

A partir de ese momento los agentes, apoyados por expertos en secuestros venidos desde Madrid, iniciaron la búsqueda de la víctima que no pudo ser localizada hasta el jueves, 22 de enero, en el interior de una caseta ubicada en las proximidades de una finca propiedad del empresario, en el término municipal de Istán.

El cuerpo de Fernando Moreno fue hallado ya sin vida maniatado a una cañería de agua, con la boca tapada con cinta adhesiva, el cuello también atado a otra conducción de agua y la cabeza cubierta.

Los investigadores creen que el suceso responde a un secuestro exprés y barajan la hipótesis de que el empresario fuera abandonado en la caseta todavía con vida, tras haber negociado con él y con su familia el pago del rescate. La autopsia reveló que el empresario falleció por asfixia, previsiblemente a consecuencia de las mordazas.

Fernando Moreno Espada era un empresario muy conocido en Marbella, donde era dueño de la empresa Materiales de Construcción Fernando Moreno y Hormigones de San Pedro y residía en San Pedro Alcántara.