Los accidentes caen hasta un 300% en la A-45 por el efecto de los radares de tramo

La puesta en marcha en los primeros meses del año 2014 de dos nuevos radares de tramo en la autovía de Las Pedrizas, la A-45, ha tenido consecuencias más que destacadas tanto en la reducción drástica de la accidentalidad como en el número de retenciones producidas en la carretera. Así lo confirman los responsables del Ministerio del Interior en una respuesta parlamentaria fechada el pasado 17 de enero y en la que llegan a cifrar en hasta un 300% el descenso de la siniestralidad en uno de los dos puntos controlados por el cinemómetro.

En concreto, este porcentaje se corresponde con el radar de tramo localizado en el punto kilómetrico 128+780 en sentido creciente (se prolonga hasta el 125+958). En este punto, según los datos oficiales, antes de la puesta en servicio del control de velocidad, el 5 de marzo de 2014, se produjeron cuatro accidentes con un número total de víctimas que ascendía a 6. "Desde su puesta en funcionamiento y hasta el 31 de diciembre de 2015 se contabilizó un solo accidente con un solo herido leve", precisa la contestación.

En el caso del segundo radar de tramo, instalado en el punto kilométrico 140+276 (aunque se prolonga hasta el 134+178), la accidentalidad descendió un 240%. En este sentido, si antes de que se activase el punto de control se produjeron 17 accidentes con un número total de víctimas de 25, desde que entró en servicio (el 1 de abril de 2014) se contabilizaron 5 siniestros con 12 heridos leves hasta finales de 2015. Ello implica una reducción de la lesividad del 108%.

La respuesta emitida por el Gobierno a una pregunta formulada por el diputado nacional del PSOE Miguel Ángel Heredia abunda en el hecho de que estos dispositivos han traído consigo una mejora en la circulación con la autovía. En este sentido, se señala que las retenciones registradas en la A-45, en sentido Málaga, pasaron de 552 kilómetros en el periodo 2010-2013 (con un total de 92 retenciones) a 177 kilómetros en el periodo 2014-2016 (con 44 retenciones). De todas ellas, se aclara, las producidas por accidentes en los tramos controlados "han experimentado un descenso del 72%". De las 7 retenciones causadas por siniestro en estas zonas de la carretera entre 2010 y 2013 se ha pasado a 2 entre 2014 y 2016.

Los responsables de la Administración central, ante la interpelación que hace Heredia en su pregunta, exponen que para la instalación de los cinemómetros se realizan estudios de accidentalidad específicos, "donde se tienen en cuenta todos los accidentes en los que la velocidad y/o la infracción de la norma es un factor concurrente". No obstante, se incide de manera especial en aquellos tramos donde además existen víctimas mortales.

Respecto a los radares instalados en la provincia de Málaga, aseguran desde el Gobierno que favorecen una reducción de la siniestralidad en las zonas de influencia de cada cinemómetro, al producirse "un efecto laminador" de la velocidad, principalmente en aquellas carreteras donde se instalan controles de velocidad en tramo. Y ello redunda en una "correcta" adecuación de la velocidad a las condiciones de la vía, "minimizándose las retenciones principalmente aquellas causadas por accidentes".