El Ayuntamiento de Málaga precinta la cocina del centro de menores de Churriana

El cierre se debe a que los extractores de humos no cumplen con la norma

Justicia afirma que ya han pedido los materiales para solucionarlo y, mientras, se cuenta con un servicio de cáterin

Llegan los primeros menores al centro de infractores de Churriana, en Málaga

Centro de Menores Infractores en Churriana, donde antes había una casa de monjas. / Javier Albiñana

El Ayuntamiento de Málaga ha precintado las cocinas del Centro de Internamiento de Menores Infractores (CIMI) que abrió en hace apenas dos semanas en Churriana. El área de Sostenibilidad Ambiental ha incoado un expediente sancionador a Meridianos, la empresa a la que la Junta de Andalucía adjudicó la gestión del mismo. El motivo es el incumplimiento de la normativa de extracción de humos.

El pasado mes de diciembre la inspección municipal verificó que las salidas de humos no sobrepasan un metro sobre el techo del edificio, como marca la ordenanza, sino que tenían un codo que vertía directamente a la fachada. Ante este precinto, desde la Consejería de Justicia indican a este periódico que ya se ha encargado el material para poner solución al incumplimiento por parte de la empresa adjudicataria. Asimismo, indican que Meridianos ha contratado a una empresa de cáterin para proporcionar el servicio de comidas a los menores internados, en tanto se pone solución, que esperan sea en los primeros días de la próxima semana.

El precinto llega después de que la comunidad de vecinos de la urbanización donde se encuentra el CIMI, denunciase el incumplimiento de la normativa. Llevan los vecinos levantando la voz contra la implantación del centro de menores y mantienen que este "no reúne las condiciones mínimas de seguridad, habitabilidad ni legalidad". Además, la Comunidad denuncia que la administración “no puede hablar de protección al menor mientras se les mantiene encerrados en un inmueble que no cumple con las condiciones mínimas exigidas por ley, en un entorno inseguro y con documentación incompleta o gravemente defectuosa.”

Cabe recordar que el alcalde de Málaga subrayó que el Centro de Internamiento "si abre es que cumple" con la legalidad. Además, para abrir necesitaban de la luz verde de Aperturas, certificando el cumplimiento de toda la legalidad. Tras unos trabajos para reformar el edificio, el CIMI recibió el visto bueno y la licencia a principio de mes, llegando los primeros menores la segunda semana de junio.

Según se recoge en el expediente sancionador emitido por el Ayuntamiento, al que este medio ha tenido acceso, el 26 de febrero de este año se notificó a Student Rental a quien Meridianos alquila el edificio, que debía adoptar las medidas correctoras en el plazo de un mes. El 6 de marzo Student Rental, propiedad de Alberto Benito, manifestó que en esa fecha el edificio se encontraba cerrado y que próximamente sería objeto de una reforma por parte de un tercero. "No obstante se trasladará el apercibimiento a dicho tercero para que la tenga en cuenta en su informe", afirma el expediente que trasladó Student Rental al Ayuntamiento.

A todas luces esto no se trasladó o no se tuvo en cuenta durante las reformas. Más tarde, el 4 de junio, los denunciantes registraron un escrito en el Ayuntamiento denunciando, justamente, que no se había puesto solución a las deficiencias. La infracción "puede ser calificada de grave", según el documento.

Cabe recordar que el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) admitió a trámite recientemente un recurso contencioso-administrativo interpuesto por la comunidad de vecinos contra la adjudicación del contrato de gestión del CIMI.

A este procedimiento judicial se añade un nuevo contencioso presentado este jueves por la Comunidad de vecinos del Olivar, contra el Ayuntamiento de Málaga, por haber permitido la apertura del edificio pese a las múltiples irregularidades denunciadas.

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