La cultura vuelve a movilizarse en contra del proyecto de la torre del puerto de Málaga. En la línea de lo ocurrido a mediados del pasado mes de enero, cuando más de trescientas personalidades secundaron un manifiesto "contra la ruptura del patrimonio cultural del paisaje" y el desarrollo del hotel, ahora otros 60 actores, músicos, escritores y artistas participan en un vídeo promovido por la Plataforma ciudadana Defendamos Nuestro Horizonte. 

Todos ellos ponen su rostro y su voz para refrendar el lema "Sí a la Bahía de Málaga, no a un rascacielos en su paisaje". Participan músicos como Miguel Ríos, que al inicio del documento se dirige a los malagueños para preguntar: "¿De verdad vais a dejar que os roben el litoral? Sí a la bahía". A él se suman Javier Ojeda, Salva Marina, Javier Ruibal, Toni Zenet, Mercedes León, Suzette Moncrief, Javier Martín o Ricardo Texidó así como el compositor Antonio Meliveo. 

Personajes del mundo de la interpretación como el director Benito Zambrano, el director José Antonio Hergueta; actores como Pedro Casablanc, Pepe Viyuela, Salva Reyna, Adelfa Calvo, Laura Baena, Asun Ayllón, Eduardo Velasco y Ángel Velasco.

También se suma la historiadora malagueña Elvira Roca; los humoristas gráficos Gallego & Rey; la directora del Museo Zabaleta Rosa Valiente, el arqueólogo Bartolomé Ruiz, la bailarina y coreógrafa Nieves Rosales, y del ámbito de la universidad el historiador del arte Francisco Rodríguez Marín, y el profesor de Ciencia Política Sebastián Escámez.

En el campo de las letras intervienen escritores como Juan Madrid, Marta Sanz, Pío Caro-Baroja y Gonzalo Campos; el poeta  Juan de Dios García; el editor de la revista Litoral Antonio Lafarque; periodistas y escritores como Guillermo Busutil y Eduardo Castro. Del mundo del arte prestan su voz y su imagen pintores como Rogelio López Cuenca, Jorge Fin, Tecla Lumbreras, Juan Carlos Hernández,  Ismael Katchili, Chema Lumbreras, y el videoartista José Ramón da.

La iniciativa busca incrementar la presión social que desde hace meses se viene cerniendo sobre el proyecto impulsado por la Autoridad Portuaria, con el respaldo del Ayuntamiento de la ciudad, para permitir la ejecución de una torre junto al dique de Levante. El inmueble alcanzará una altura de 150 metros, según este colectivo, escala que los promotores, un fondo de inversión catarí, rebajan a poco más de 116 metros.

Y ello en un momento clave de una iniciativa que acumula ya más de cinco años de trámites. Tras aprobarse provisionalmente la modificación urbanística necesaria para permitir esta operación, se prevé que en las próximas semanas se complete la documentación precisa para que el ajuste sea validado de manera definitiva por el Pleno de Málaga. Un paso que, a priori, está garantizado debido a que los votos de los concejales del Partido Popular y Ciudadanos, al que agregar el del no adscrito Juan Cassá, suman mayoría.

Será en ese momento cuando el procedimiento abandonará la esfera municipal para dar el salto a Madrid, donde la última palabra respecto a la autorización o no del pretendido uso hotelero en suelo portuario corresponde al Consejo de Ministros.