El confinamiento motivado por el coronavirus tiene también su reflejo en las estadísticas de criminalidad. Tal vez uno de los pocos efectos positivos del encierro. Así lo indica el último informe publicado por el Ministerio del Interior correspondiente al primer semestre de este año, en el que se aprecia cómo en ese periodo los delitos en la provincia de Málaga cayeron un 22,6% con respecto a 2019.

En concreto, entre enero y junio, las infracciones penales sumaron un total de 29.014, frente a las 37.483 del pasado año. Según los datos registrados por los diferentes Cuerpos policiales, descendieron casi todos los tipos delictivos, con especial incidencia en aquellos relacionados con los robos y hurtos.

Así, el informe detalla que descienden los robos con violencia o intimidación (-33,3%); los robos con fuerza (-23,9%), en domicilios (-27%); los hurtos (-44,6%); y las sustracciones de vehículos (-39,2%). También hubo menos delitos graves y menos graves de lesiones y riña tumultuaria (-9,2%) y los secuestros (-50%). En menor medida lo hace el tráfico de drogas (-5,6%), además de los delitos contra la libertad e indemnidad sexual (-19,5%), si bien, hubo un aumento del 42,9% de las violaciones –agresión sexual con penetración–, que pasaron de 21 a 30.

Este último es uno de los dos únicos tipos penales que subieron en los primeros meses de este año. Llama la atención también el exponencial incremento de las tentativas de asesinato y homicidio doloso. En los primeros seis meses de 2019 hubo 12, y en el mismo periodo de este año se ha pasado a 23. Son 11 más, lo que lleva a una subida del 91,7%. De media, este delito aumentó un 64,3%, con una subida generalizada en todas las provincias andaluzas, a excepción de Huelva (-33%). No obstante, los homicidios dolosos y asesinatos que se llegaron a consumar en la provincia de Málaga bajaron un 77,8% (pasaron de 9 a 2).

En lo que se refiere a las tentativas de homicidio y asesinato, las estadísticas de Interior señalan a la Costa del Sol occidental. En Fuengirola se produjeron 9, frente a un único caso en 2019, mientras que en Marbella, donde en el primer semestre del año pasado no hubo ninguno, ha habido tres. Aquí, en mayo, un joven se presentó en el hospital con cuatro disparos en las piernas. También fue en Marbella, en junio, cuando todavía no se había levantado el estado de alarma, donde un motorista mató a tiros a un varón en plena calle y a la luz del día.

En Málaga capital, aunque la variación es negativa, hubo un total de seis tentativas y un homicidio. Aquí, cabe recordar la muerte de hombre por una bala perdida en un tiroteo entre dos clanes en La Palma. El vecino, de 74 años, estaba en su casa cuando recibió el impacto.