Marítimas

Las ‘golondrinas’ cambian su atraque en el puerto de Málaga

  • Las obras para la marina de megayates obligan a modificar el amarre de las embarcaciones que dan paseos por la bahía

‘Golondrinas’ atracadas este fin de semana en el muelle dos del puerto de Málaga.

‘Golondrinas’ atracadas este fin de semana en el muelle dos del puerto de Málaga. / J. C. Cilveti

A principios del pasado mes de mayo comenzaron las obras que convertirán a los muelles uno y dos en la futura marina de megayates. Vallado todo el perímetro de esta zona concesionada y sólo sin cerrar momentáneamente la zona de la ochava, la unión entre los muelles uno y dos, los trabajos se iniciaban realizando una canalización que vehiculizará diferentes servicios. Mientras tanto, en el antiguo solar donde estaba situada la estación de la Cruz Roja en levante, se comenzaban a construir una serie de bloques que conformarán dos pequeños diques de abrigo, uno de 30 y otro de 50 metros que, situados transversalmente en los muelles uno y dos evitarán aguajes delimitando una nueva dársena que albergará a la mayor parte de los yates que atraquen en esta marina.

Con un tiempo de ejecución de las obras que, según previsiones, no superará los 250 días, la pasada semana, las tres golondrinas situadas en la ochava cambiaban de ubicación. De su amarre habitual en esta zona, las embarcaciones que realizan paseos por la bahía pasaban a la esquina este del muelle número dos; una recolocación temporal que podrá cambiar en función de las necesidades de la obra que se está ejecutando.

Aún se busca la mejor ubicación para el tiempo que duren los trabajos

Ante este hecho, el espacio definitivo de las golondrinas aún no está establecido; una circunstancia que genera una cierta complicación tanto para la concesionaria de la marina como para la Autoridad Portuaria. Teniendo en cuenta que el atraque de estas tres embarcaciones necesita de un significativo espacio para el tránsito de los pasajeros, su habitual amarre en la ochava restaría espacio a los yates, amén de tener que dotar a este recinto de barcos de recreo privado de un acceso público especial para los usuarios que contraten un paseo por la bahía.

Sin que exista por el momento, según ha podido saber Málaga Hoy, una resolución sobre cuál será la ubicación definitiva de las golondrinas, una solución de la que ya se ha hablado pasaría por que estas embarcaciones sólo pudieran acceder a las aguas de la marina de megayates para realizar los embarques y desembarques. Otra posibilidad que también está sobre la mesa aludiría al uso de una parte del muelle número dos no concesionado, una opción a la que habría que añadir la habilitación de algún otro muelle del puerto; una zona en la que esté permitido el libre acceso para todo el que desee disfrutar de una navegación por la bahía malagueña.

Más información sobre marítimas en El blog de Juan Carlos Cilveti: La mar de historias.

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