La borrasca Celia sigue azotando en la provincia de Málaga. Las lluvias de este martes, aunque no han sido tan abundantes como las del lunes, contribuyen moderadamente a paliar la situación de sequía en la que se encuentran los pantanos de la provincia de Málaga, aunque no soluciona el problema.

Atendiendo a los datos de la red Hidrosur –dependiente de la Consejería de Medio Ambiente–, en estos dos días los embalses han recogido 5,39 hectómetros cúbicos, lo que se estima que equivale aproximadamente a un mes de consumo en la capital malagueña y a unos diecisiete días en la provincia.

Actualmente, los siete embalses malagueños se encuentran al 32,17% de su capacidad, con 198,43 hectómetros cúbicos acumulados (en la provincia se suelen distribuir unos 114 hectómetros cúbicos anuales). Una cifra muy inferior a la que registraban el año anterior con 365,85 hectómetros cúbicos acumulados.

Con las lluvias de Celia, las presas de La Concepción (en Istán) y el del Conde del Guadalhorce (en Ardales) han subido más de dos hectómetros cada uno, por lo que han resultado ser los más beneficiados por la borrasca. Los de Casasola (Almogía) y Guadalhorce apenas han sumado un hectrómetro; mientras que el de Guadalteba y Viñuela han disminuido su capacidad en 1,13 y 015, respectivamente.

Las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) para este miércoles es que los cielos seguirán nubosos, o cubiertos en la mitad oriental, donde se esperan chubascos que pueden ir ocasionalmente acompañados de tormentas y ser localmente fuertes o persistentes. En el resto de la provincia malagueña son probables las precipitaciones intermitentes de carácter débil. Seguirá la calima también en toda la provincia malagueña. Las temperaturas bajarán, salvo las máximas del tercio occidental, donde subirán. En cuanto al viento, soplará flojo de poniente, aumentando en el litoral.