'Papá, se me ha roto el móvil': el curioso intento de estafa a un padre de Málaga... con una bebé de guardería

¿Cómo reaccionaría si recibiera un supuesto mensaje de su hijo pidiendo auxilio siendo padre de una bebé de guardería? Es lo que le ha ocurrido a un malagueño, que ha recibido un SMS con el clásico gancho de la llamada estafa del hijo en apuros. El mensaje, con tono urgente y familiar, decía así: “Hola, papá, mi teléfono se me ha roto. Este va a ser mi número. Envíame un mensaje por WhatsApp en cuanto puedas". Al timador se le escapó comprobar un detalle clave: su víctima, o la que él pretendía que fuera, no tiene hijos mayores, mucho menos en edad de disponer de teléfono móvil ni siquiera de deletrear su nombre. Su único vástago es de apenas dos años. "Solo tengo una niña que está en la guardería y que, obviamente, no tiene móvil", ha relatado a este periódico.

Conocedor de que estaba siendo engañado, el progenitor quiso poner prueba al ciberdelincuente. Así, le envió un texto de vuelta: "Hola, hija, ¿cómo estás?". Pero ya no recibió más respuestas. "No ha ido más allá del SMS. Aunque le escribí para ver si le sacaba algo más, no me ha respondido", ha explicado.

La situación, que podría haber puesto en alerta a cualquier familia preocupada, resultó más bien surrealista en este caso, pues el destinatario rápidamente cayó en la cuenta de lo absurdo. Entre risas, decidió compartir la anécdota a través de las redes sociales, donde ha despertado risas y también preocupación. "Me ha resultado gracioso que escriban eso teniendo yo una hija tan pequeña. Justo cuando lo he recibido estaba en la guardería", ha afirmado.

Hace unos meses, la Guardia Civil logró esclarecer casi una veintena de denuncias de familias de Rincón de la Victoria, a las que entre los años 2023 y 2024 llegaron a estafarles unos 77.000 euros con el timo del 'hijo en apuros'.

La investigación de la llamada operación Transfijo, con la que los agentes daban por desarticulada una red criminal dedicada a realizar estafas de forma telemática, se inició tras recibir varias denuncias en las que las víctimas manifestaban haber sido engañadas. Lo habitual en estos casos es que los ciberdelincuentes suplanten la identidad de los hijos de las víctimas mediante mensajes de texto, simulando tener problemas con su línea telefónica y aportando una nueva para comunicarse. El paso siguiente es pedir a las víctimas que realicen transferencias de dinero, aduciendo no poder acceder a sus aplicaciones bancarias.

Se identificaron 32 personas como supuestos autores de los delitos de estafa y pertenencia a organización criminal, los cuales fueron localizados en distintas provincias españolas como Madrid, Barcelona, Girona, Valencia, Huesca, Málaga y Sevilla. También se realizaron gestiones con autoridades policiales de otros países como Italia y Países Bajos para la localización de otros investigados.

Una estafa conocida, pero cada vez más descarada

La técnica del hijo en apuros ha ganado popularidad entre los estafadores, sobre todo través de mensajes SMS o de WhatsApp. El timador suele hacerse pasar por un hijo o hija que supuestamente ha perdido el móvil y necesita contactar urgentemente a sus padres con otro número. Una vez establecen la conversación, piden dinero por alguna “emergencia”. Si el padre o la madre acepta, el ciberdelincuente le envía los detalles de la cuenta en la que deben ingresar la cantidad, como el IBAN, el nombre, la cantidad de dinero y la referencia. Las cifras que se piden suelen llegar a miles de euros, según se ha visto en otras ocasiones. Un dinero que nunca será devuelto.