El Ministerio de Empleo publicó ayer que Málaga cerró el mes de octubre con 153.764 parados, 4.629 más que en septiembre, un 3,1% más. Eso supone que es el tercer mes consecutivo de ascenso porque, pese a estar en plena temporada de verano, el paro registrado creció en los meses de agosto y septiembre. De hecho, ahora se contabilizan 10.000 desempleados más que en julio. La noticia positiva es que hay 13.528 menos que hace un año.
Málaga sigue siendo una de las provincias europeas con mayor desempleo, pero el análisis varía en función de la metodología que se use. Habitualmente el paro registrado en las oficinas del Servicio Andaluz de Empleo -un dato dado a conocer mensualmente por el Ministerio de Empleo- era muy inferior al que recogía la Encuesta de Población Activa (EPA), un análisis realizado trimestralmente por el Instituto Nacional de Estadística. Sin embargo, casi de forma histórica, ambos números empiezan a casar, lo que implica que el paro registrado está tirando al alza y la EPA a la baja. El paro registrado está, como se ha mencionado, en 153.764 personas y la EPA, publicada el pasado 26 de octubre, indicaba que en Málaga había a finales de septiembre 158.300 desempleados y que había sido el mejor verano desde 2008. Según esta encuesta se estaba ante el mayor número de ocupados y el menor de parados desde el inicio de la crisis, lo que permitía alcanzar una tasa de paro del 20,8%, solo cuatro puntos más que la media nacional. Si se comparan ambas metodologías solo en septiembre, el paro registrado indicaba que Málaga tenía 149.135 parados, 9.000 menos que lo que marcaba la EPA. La diferencia es relativamente pequeña en comparación con otros ejercicios. Los expertos prefieren utilizar la EPA porque es más homogénea y permite realizar mejores comparaciones con otros estados, aunque para gustos los colores.
En cualquier caso, lo que resulta obvio es que el mercado laboral en Málaga es una montaña rusa que tiene una alta dependencia de los meses buenos del turismo. El paro registrado se elevó en 4.682 personas en el sector servicios el mes pasado, mientras que apenas lo hizo en 71 en la industria, en 189 en el colectivo de personas sin un empleo anterior y cayó en la construcción y la agricultura.
El número de desempleados es sumamente preocupante pero, como puede observarse, está sujeto a diversos tipos de conteo. Lo que resulta inequívoco es el número de personas que están afiliadas a la Seguridad Social y en el mes de octubre descendió en 1.690 personas, un 0,3%. Ahora hay 591.016 ciudadanos que cotizan. No está en su registro más alto -se llegó a superar los 600.000 en la época de bonanza- pero son casi 30.500 más que hace un año, lo cual siempre invita al optimismo.
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