El sacerdote de Toledo detenido en Torremolinos por tráfico de drogas queda en libertad: se niega a declarar

El sacerdote de la Archidiócesis de Toledo que este fin de semana había sido detenido cuando se encontraba de vacaciones en Torremolinos por, supuestamente, estar en posesión de drogas de diseño, como cocaína rosa, ya está libre, según han confirmado desde el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA). El cura, tras pasar a disposición judicial, se ha acogido a su derecho a no aportar su versión de los hechos que motivaron la actuación policial.

El titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Torremolinos ha acordado la puesta en libertad provisional del clérigo, que según informó ayer desde la Comisaría provincial de Málaga, fue arrestado después de que la Policía Nacional lo sorprendiera con diferentes sustancias estupefacientes. Después, un registro en su apartamento vacacional llevaría a la incautación de más drogas. El cura se acogió a su derecho a no declarar y deberá comparecer en sede judicial cuantas veces sea convocado, han indicado las mismas fuentes judiciales consultadas.

El detenido, no obstante, está investigado por la presunta comisión de un delito contra la salud pública de sustancias que causan grave daño a la salud. Los agentes le intervinieron varias pequeñas cantidades de diferentes sustancias que en su totalidad superaban la cantidad considerada para el autoconsumo, lo que, según la Policía, podría sugerir su intención de traficar con este tipo de drogas.

La causa sigue su tramitación en este mismo juzgado de Torremolinos, que se encontraba de guardia cuando ocurrió la detención y la puesta a disposición judicial del investigado, y se encuentra pendiente del análisis del estupefaciente decomisado.

Tras difundirse los hechos, el Arzobispado de Toledo emitió un comunicado oficial en el que se ha limitado a confirmar el arresto en la localidad malagueña, sin precisar qué detalles han motivado la actuación policial. Asimismo, aseguró que el cura arrestado ha sido "apartado cautelarmente" del ejercicio del ministerio y de su oficio. La archidiócesis asegura tener “plena confianza en la justicia” y manifiesta su disposición a colaborar con ella.

En la nota publicada en su página web, la institución lamenta "profundamente" los hechos ocurridos y "reprueba cualquier conducta delictiva". También pide perdón al "pueblo de Dios por los daños morales" que puedan ocasionar los presuntos delitos de un sacerdote de la archidiócesis. Desmiente, a renglón seguido, que el detenido sea rector del Seminario Mayor de Toledo, cuyo nombre había sido publicado en otros medios de comunicación.

También desde la Diócesis de Málaga se pronunciaron al respecto de la detención que dio a conocer el Arzobispado de Toledo. Así, ha subrayado que el clérigo no pertenece a esta institución ni tampoco ha recibido ningún encargo pastoral en ella.

A la espera de que la Justicia "clarifique las acusaciones", transmitía su "pesar por el daño que se ha podido producir" y porque, considera el colectivo religioso, "empaña el buen hacer de tantos sacerdotes que ejercen su ministerio con fidelidad y entrega".