Venta Las Navas de Málaga da una lección sobre como responder a las malas críticas: "En el momento en el que se dan faltas de respeto se da por finalizado el evento"
El restaurante ha contestado a un vídeo viral con una reseña negativa, compartiendo su versión de lo ocurrido
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Responder a una mala crítica no es fácil, y menos cuando esta se hace a través de un vídeo que acaba siendo viral. Sin embargo, el restaurante Venta Las Navas de Málaga ha contestado de forma ejemplar. Así lo señalan los miles de mensajes que tiene el vídeo publicado por el establecimiento malagueño a través de sus redes sociales. En esta grabación, que dura unos dos minutos, se relata lo ocurrido durante una boda que tuvo lugar en el restaurante. Y como señala el espacio, se consideran "flexibles", pero "en el momento en el que empiezan las faltas de respeto hacia nuestro personal, se da por finalizado el evento".
El objetivo principal del testimonio del restaurante es el de compartir su lado de la historia, "hay un vídeo circulando por redes sociales y nosotros queremos dar nuestra versión de lo ocurrido". A raíz del vídeo, el restaurante está recibiendo reseñas negativas en su perfil de Google, pero los usuarios de las redes sociales aplauden la respuesta del restaurante.
Los hechos ocurrieron el sábado 6 de septiembre, durante la celebración de una boda que albergó unas 90 personas. El restaurante explica que para este evento se había contratado menú de adultos a 35 euros y de niños por 25, así como una barra libre durante el servicio y una tarta. Aparte, el restaurante ofreció una limonada de bienvenida a los comensales, y decoró las dos salas donde se desarrolló el evento (en uno tuvo lugar la cena y en el otro se celebró la ceremonia).
El restaurante apunta que los novios comunican que habían contratado los servicios de un DJ externo para continuar la fiesta dentro del local. Este servicio de música se extendía hasta las 5 de la mañana, mientras que el horario máximo de cierre de Las Navas es hasta las 4. "Los novios dieron por hecho que tras el horario de cierre podrían seguir haciendo uso y disfrute de nuestro establecimiento", adelanta el restaurante sobre lo que ocurre.
En principio llegaron a un acuerdo con la pareja para que contratara un pack de 10 botellas de bebida, que incluía dos horas de fiesta, más otra que añadieron desde el local de hostelería "de cortesía". Los novios aceptaron la propuesta y el evento continuó. Cuando llegó la hora acordada de finalización, la organización lo comunicó, y los comensales respondieron que aún les quedaban cinco botellas y que no querían que la fiesta acabara.
Fue en este momento "cuando surgen las discrepancias", el restaurante relata que uno de los invitados se puso especialmente agresivo, rompiendo cristales y vasos, así como dejando pañales usados en el salón. "Lo que no se puede pretender es contar solo una parte de lo ocurrido y omitir el resto de la situación", resume el restaurante en el vídeo. Además, apuntan que en ningún momento se impidió que se llevaran las cinco botellas que habían pagado.
"Nosotros podemos ser flexibles hasta cierto punto. Pero en el momento en el que empiezan las faltas de respeto y la conducta violenta hacia nuestro personal, se da por finalizado el evento", subraya Las Navas, con un mensaje claro sobre cómo actuar ante estos casos.
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