Siguen los movimientos en el mercado de Primera RFEF a pesar de que todavía falta para la ventana de fichajes de enero. Pero los rivales del Málaga en el Grupo 2 no pierden el tiempo. Después de que hace poco el Antequera hiciese oficial la contratación de Carlos Kameni, el San Fernando ha realizado dos refuerzos de una tacada: Lillo Castellano y Alejandro Gutiérrez.

Manuel Castellano Castro Lillo (Aspe, 27 de marzo de 1989) es un experimentado jugador alicantino que puede actuar de central y de lateral derecho, procede del CD Alcoyano y fue internacional sub21 con España. Formado en la cantera del Valencia, ha militado en equipos como Real Murcia, Almería B, Eibar, Sporting de Gijón, Maccabi Haifa, Osasuna y Numancia. 

En el caso de Alejandro Gutiérrez Guti (Málaga, 8 de mayo de 2002), hay que apuntar que es malagueño y estuvo en la La Academia blanquiazul. Procedente del FC Andorra, con el que ascendió a Primera RFEF en la 2021-22, el arquero de 21 años pasó por el Juvenil A malaguista, con el que militó en División de Honor durante la 2020-21. Antes, Guti ya había debutado en la máxima categoría juvenil con solo 17 años en el CD Dos Hermanas. 

🆕 ¡Lillo Castellano, nuevo jugador azulino!🛡️ ¡El experimentado zaguero llega procedente del @cd_alcoyano para potenciar la retaguardia del #SanFernando!¡Bienvenido, Lillo!https://t.co/mb4LoYjmx9

— San Fernando CD (@SanFernando_CD) November 7, 2023

🆕 ¡Alejandro Gutiérrez, nuevo portero del #SanFernando!🧤 Guardameta malagueño de 21 años que formó parte del @fcandorra que ascendió a @LaLiga2. ¡Bienvenido a La Isla, Ale!

— San Fernando CD (@SanFernando_CD) November 7, 2023

Munúa, despedido en Murcia

Golpe de timón en el Real Murcia. El conjunto pimentonero ha decidido destituir al que fuera jugador del Málaga Gustavo Munúa después de las dos últimas derrotas que ha enlazado, buscando un cambio importante en una temporada que está transcurriendo muy lejos de lo esperado por los rectores de un club que ha apostado económicamente por el ascenso a Segunda División y que está muy lejos de los resultados deseados.

La derrota en el feudo del Ceuta el pasado domingo, unido a la eliminación de la Copa del Rey ante la Arandina, han sido los dos resultados que han desembocado una destitución que parecía condenada a llegar más pronto que tarde. Y es que la etapa de Gustavo Munúa en el banquillo del Real Murcia ha sido accidentada prácticamente desde el primer momento.