El Málaga regresó esta mañana a los entrenamientos tras el triunfo en La Rosaleda ante el Numancia (2-1). Los blanquiazules, como ya avisaba Pellicer en rueda de prensa, pasaron página pronto y ya preparan el próximo envite liguero ante el líder, el Cádiz, en el Ramón de Carranza este domingo. Como viene siendo habitual tras partido, sesión de menor intensidad para titulares y entrenamiento rutinario para el resto. Hubo un par de novedades.

Los titulares ante los numantinos se ejercitaron en las galerías interiores del Ciudad de Málaga, en el gimnasio. El resto de blanquiazules estuvieron sobre el césped con el balón como gran protagonista de la mañana. El buen ambiente que generó el triunfo era patente. Una de las novedades que arrojó la sesión fue Mikel Villanueva. El venezolano, que lleva varias semanas fuera de la rueda por un contratiempo médico, realizó parte de la sesión al mismo ritmo que sus compañeros. Eso sí, la finalizó al margen a las órdenes de Manu Gestoso.

Otro jugador que estuvo siguiendo las pautas del readaptador físico del primer equipo fue Keidi Bare. El albanés aún no está recuperado y realizó trabajo sobre el césped con Gestoso en la recta final de su recuperación. El meta sueco Daniel Strindholm fue una de las novedades de la sesión en clave canteranos, junto a él estuvo Gonzalo, convocado en este último partido. Al igual que el meta, Juande también se ejercitó con los mayores. En la lista de tocados continúa Cristo, que se ejercitó en el gimnasio. Junto a él estuvo también Kellyan, que recibió un golpe ayer en el partido del filial ante el Torredonjimeno.