El Málaga, que a pesar del aplazamiento de las dos próximas jornadas iba a continuar trabajando, decidió frenar totalmente su actividad por la crisis del coronavirus. Primero se suspendió el partido de entrenamiento que tenía previsto disputar en el Ciudad de Málaga contra el Atlético Malagueño “siguiendo los consejos de las autoridades sanitarias”, pero se iba a continuar con una sesión normal. Unos minutos más tarde, la entidad malacitana comunicó oficialmente que también se para el trabajo, de momento, hasta el próximo martes 17. Fue el primer paso de la bunkerización del club.

Eso sí, en el club quisieron dejar claro que se debe a medidas preventivas y que no se conoce ningún positivo por el Covid_19 hasta la fecha: “Los servicios médicos del club han decidido suspender definitivamente el entrenamiento de hoy. Esta decisión no corresponde a una medida de prevención por algún caso de coronavirus, es por precaución siguiendo los parámetros de las autoridades sanitarias. Rogamos disculpas por las molestias ocasionadas a los profesionales que iban a cubrir el entrenamiento, pero son causas ajenas al club. El equipo tiene previsto regresar al trabajo el martes próximo”.

El día fue de comunicados. Después de parar todos los entrenamientos colectivos (ya había hecho lo propio con todas sus categorías salvo los primeros equipos masculino y femenino, filial y juvenil A), llegó el turno de las medidas relacionadas con el resto de empleados de la entidad. Al mediodía de ayer hizo oficial el cese de la actividad en el museo y la tienda y las taquillas de La Rosaleda.

“En base a las diferentes decisiones que se están tomando tanto en Andalucía como en el resto de España y, después de haber recibido los comunicados de LaLiga y la RFEF sobre la suspensión de próximos partidos, el Málaga ha decidido seguir protegiendo la salud de sus empleados y aficionados. Es por ello que, haciendo un ejercicio de responsabilidad, el Málaga cerrará a partir del lunes, 16 de marzo, de manera temporal las taquillas de La Rosaleda. Sí se mantendrá disponible la sección web de taquilla para que todos los abonados y aficionados malaguistas puedan seguir haciendo las gestiones pertinentes”.

“Además, se lleva a cabo también el cierre de la tienda ubicada en el estadio. El resto de los establecimientos blanquiazules (CC Larios, CC Vialia, Centro histórico, CC Rincón de la Victoria, Fuengirola y Torre del Mar) quedan sujetos a las normas de cada centro comercial y se rigen por dicho horario. La Tienda MCF online sí continuará con su actividad habitual. El museo también se mantendrá cerrado de manera temporal a expensas de los nuevos acontecimientos que se vayan desarrollando. Desde la entidad pedimos comprensión a nuestros aficionados por estas medidas de responsabilidad sanitaria tomadas ante una situación ajena al club”, finalizaba el comunicado.

No sería el último. Cerca de las 17:30 se informó de un paso más en el blindaje de Martiricos, que se extendía ya a todas las áreas del club: “El Málaga CF, siguiendo las recomendaciones del Gobierno ante la situación sanitaria actual en el país, ha optado por seguir trabajando, pero de manera telemática. De esta manera, los trabajadores de la entidad blanquiazul realizarán teletrabajo desde este viernes, 13 de marzo. A la espera de la evolución de los acontecimientos. Todos los departamentos que conforman el Málaga CF continuarán trabajando desde casa para no frenar la actividad natural del club. Las oficinas de La Rosaleda contarán con unos servicios mínimos con el objetivo de continuar con el mantenimiento diario del club”. Martiricos ya es un búnker.