El ramonazo que se vivió en La Rosaleda llevó a la afición a volver a creer en las posibilidades del Málaga CF tras unas últimas experiencias en La Rosaleda que vaciaron el vaso del optimismo entre los blanquiazules. Para Ramón Enríquez en particular fue una tarde especial, de reencontrarse a sí mismo tras un año realmente complejo para él, castigado por las lesiones que le impidieron su evolución, crecimiento y regularidad.

"Las sensaciones del equipo fueron de menos a más, nos encontramos más cómodos y nos juntamos más futbolistas de creación y dimos un paso adelante", explicaba el orgiveño tras el partido, en el que completó muy buenos minutos y fue clave con el gol que significaba el 2-2, un golazo: "Me siento más cómodo con el golpeo de interior, pero le di con todas mis ganas y fuerzas y fue para dentro. Estoy contento, porque es cierto que meto pocos goles, aunque fueron buenos goles, pero me quedo más con que fue un punto cuando merecimos ganar. Esto debe ser un punto de partida hacia delante".

Ramón disputó 88 minutos ante el Sporting y fue el jugador que más pidió y tuvo la pelota de los blanquiazules. Tocó la bola en 94 ocasiones con un 92% de precisión en el pase (77/84), y completó con éxito cinco de los seis balones en largo que probó. No falló ninguno de los regates que intentó (2/2), sólo perdió un duelo por bajo (3/4) y ganó la mitad por alto (2/4).

José Alberto alabó su papel y su gol, destacando la satisfacción por su partido: "Me voy muy contento con el partido y el segundo tiempo, que tiene un mérito increíble. Me alegro enormemente por el partido de Ramón y por el gol que hace. Es algo que insistimos muchísimo con él, que le tiene que pegar, y el partido espectacular que hizo se completa con ese golazo".

Su duro año 2021

"Vengo de un 2021 difícil, en el que tuve tres lesiones, que he sacrificado mucho y he trabajado mucho. Empezar el año de esta forma, empatando, dando un punto al equipo y metiendo ese gol. Acordándome en un momento de todos esos ratos difíciles, es para estar contento. Celebré con mucha rabia", explicaba Ramón, al que tres lesiones diferentes le han frenado en un año que debía ser importante para él y su evolución e impacto en el equipo.

El jugador quiere comenzar así un año 2022 en el que espera ganar regularidad y seguir sumando minutos e importancia en el Málaga: "Son momentos por los que todo deportista profesional debe pasar alguna vez, a día de hoy te ayuda a aprovechar esas situaciones y dar un sentido especial. Ya ha pasado un 2021 que a nivel individual ha sido muy difícil, ya a mirar hacia adelante".