No es frecuente escuchar la voz de Richard Shaheen en los medios de comunicación. De hecho, después de su nombramiento como director general del Málaga ni siquiera protagonizó la clásica rueda de prensa de presentación. Su imagen sí que ha tenido mayor recorrido, puesto que es habitual ahora verle en actos públicos de la entidad, en partidos, entrenamientos y hasta a alguna actividad ociosa como ver el Unicaja en directo en el Martín Carpena.

Habló brevemente pero de manera gentil a pesar de que tenía cierta prisa por tener otra cita oficial después del acto que el Málaga llevó a cabo ayer (junto con la Fundación del club) en colaboración con la Universidad de Málaga. Una mesa redonda en la que se debatió sobre la violencia machista. Acudieron David Lombán (Málaga), Ana Buceta (Málaga Femenino) y Tamara Jiménez (Málaga Genuine) entre otros. Dentro, el norteamericano escuchó. Una vez que salió sus pocas frases valen oro para situarse en el tablero.

Con una gran educación y sin perder la sonrisa, pidió un poco más de tiempo para comparecer públicamente. “Necesito un poco más de tiempo para organizar, para dar una información positiva”, comentó amigablemente, pidiendo algo de comprensión con su papel. De este punto, a otro algo más elevado y dirigido a los aficionados, ávidos de saber qué va a pasar con el club en estos tiempos de dificultad económica. “Estoy peleando por el club, poniendo al Málaga en primer lugar de todo”, añadía el ejecutivo.

La tercera pata de su intervención fue la siguiente: “No sé el día exacto de la reunión, la semana próxima o en el plazo de dos semanas se producirá”. Hay que recordar que queda pendiente una reunión con LaLiga en breve para evaluar cómo van las medidas tomadas para corregir el desfase de tesorería y que popularmente se conoce como plan de viabilidad. Ya advertía en estas páginas Javier Tebas de que el Málaga está buscando un préstamo para solventar la situación tensa que hay ahora mismo y reconocía que en breve habría un encuentro. Tebas insistió en Málaga Hoy en que la situación límite llegaría entre enero y febrero si no se encuentran soluciones, vía préstamo o venta de jugadores. Recalcó el presidente de LaLiga que la venta del club no le parecía la mejor solución por la urgencia que había para tomar soluciones.