La plantilla y el cuerpo técnico del Málaga están pendientes de pasar por tercera vez los análisis del coronavirus COVID-19 antes del fin de semana. El conjunto blanquiazul se someterá a estas pruebas el jueves o, como muy tarde el viernes, con el objetivo de tener los resultados disponibles antes de la semana que viene en la que, presumiblemente, los equipos profesionales podrán subir otra fase en su particular desescalada que les permita entrenarse ya en grupos amplios.

La escuadra malacitana no cuenta con ningún positivo entre sus filas y espera mantenerse así después de esta semana de entrenamientos en grupo e hasta 14 jugadores. “Los tenemos que aclimatar, los jugadores tienen que entrenarse sin guantes ni mascarillas, normal. Nosotros hemos de cumplir protocolos, pasamos los tests, dimos todos negativos. Tienen que saber que tienen que seguir igual cuando acaben su trabajo, tener responsabilidad con su entorno. Al final todo se hace como hábito. Esperemos que podamos quitarnos las mascarillas y abrazarnos, eso sería señal de que hay vacuna y volvemos a la normalidad”, explicaba al respecto Sergio Pellicer en la Ser.

A dos semanas para que arranque LaLiga de nuevo las medidas de seguridad para evitar contagios siguen siendo bastante férreas y desde varios estamentos del club se ha mandado el mensaje de no bajar la guardia y evitar escenarios como el que se le ha presentado al Sevilla después de que varios de sus jugadores se reunieran en una comida con bastantes personas.