málaga cf

Un mensaje dedicado a muchos receptores

  • Muñiz elabora un discurso cargado de sentimiento y realidad en su primera rueda de prensa de la temporada

  • "Va a entrenar y competir el que quiera estar aquí", apostilla el técnico

Muñiz observa a sus jugadores durante el entrenamiento de ayer en las instalaciones del Anexo en La Rosaleda.

Muñiz observa a sus jugadores durante el entrenamiento de ayer en las instalaciones del Anexo en La Rosaleda. / Álvaro cabrera

Hacía casi dos meses que Juan Ramón López Muñiz no se sentaba en la Sala de Prensa Juán Cortés de La Rosaleda. Ha pasado mucho tiempo y han sucedido muchas cosas desde que se oficializara la contratación del gijonés. Descartes, bajas y fichajes, estadía en Estepona y numerosos amistosos. Todo esto sin los testimonios del técnico, que ayer hizo un buen repaso a todo ello. Lanzó varios mensajes, algún dardo y mucho malaguismo: "Todo lo que sea el Málaga me atrae, en momentos fáciles y difíciles. Tenemos que defender este escudo a muerte. Va por encima de todo".

"La valoración de la pretemporada es muy positiva. La utilizamos un poco para conocernos porque se incorporó gente nueva y un cuerpo técnico nuevo. Pasamos muchas horas juntos. Una de las cosas más importantes es que vayamos todos en la línea de conseguir un buen equipo, en el campo y fuera del campo, en el trabajo que se hace y no se ve", explicaba el técnico sobre la pretemporada: "Todos convivimos y de ahí hay que sacar un buen equipo que sirva para competir durante toda la temporada. Cuanto mejor equipo tengamos en lo humano mejor resultado habrá. Y creo que se ha conseguido. Todo el mundo tiene claro cómo queremos y debemos jugar. Sabemos qué nos vamos a encontrar, una categoría muy difícil. Todo el mundo está preparado para competir".

Sobre el encuentro ante el Lugo de mañana en el Anxo Carro (19:30), Muñiz reconoció que tiene medianamente claro el once que sacará ante los albivermellos, pese a lo difícil que se lo están poniendo sus jugadores: "Más o menos tienes una idea, pero esa idea no finaliza hasta que no acaban los entrenamientos semanales. Tengo una ventaja, a día de hoy podría poner a cualquier jugador y todos saben cómo queremos qué se juegue, que se compita. Cualquiera que ponga va a salir y va a dar buen rendimiento. Queda un entrenamiento y puedo modificar algo. Lo más importante no es tener un once sino un equipo de 24 jugadores preparados. Todos los que están entrenando tienen opción de jugar".

Sobre los lucenses, donde figura el delantero malagueño Jona, no escatimó en halagos: "Lleva una trayectoria de unos años, mantiene una filosofía de juego desde hace años. Quiere la posesión. Tiene jugadores expertos en la categoría y que van a competir de una manera extraordinaria. Me espero un muy buen equipo. Tendremos que ponernos a su nivel si queremos ganar el partido".

Uno de los dardos que lanzó el técnico durante su rueda de prensa tuvo como objetivo a Roberto Rosales. El venezolano lleva varios días apartado del equipo, entrenando al margen ya que ha pedido salir. Sobre él parecía estar hablado Muñiz cuando saltó lo siguiente: "Va a competir y va a entrenar el que quera estar aquí, el que sepa que el equipo está en un momento difícil. El que quiera asumir eso, quedarse, sumar para el equipo, no tendrá problema. El que no quiera estar, no vamos a convencerlo, tendrá que llegar a un acuerdo con el club. El objetivo personal es siempre secundario. Lo primero es el objetivo del equipo, del club y de la afición". Al que eximió de su posible salida fue a Álex Mula: "Cuento con él, es un buen profesional. Desde el primer día se puso el mono de trabajo. Con profesionales como él cuento siempre".

Una de las decisiones más importantes que ha tomado hasta ahora Muñiz es con la terna de capitanes. El técnico eligió a Ricca, Lacen y Adrián para relevar a Recio, Rosales y Miguel Torres de esa "carga". "No es un relevo. Venimos de una situación muy difícil, fue un descenso traumático, un año muy largo, duro, difícil. No es un cambio, hay que liberar ese peso, hay que compartirlo también. Ser capitán supone mucho desgaste y a lo mejor la gente no lo ve o no lo nota, pero lo lleva", explicaba el técnico, que añadía: "Se decidió un poco por liberar esa situación. Al final, el capitán se gana el respeto con el trabajo. Todos saben que todos están trabajando bien. Lo del brazalete es anecdótico. Todos tenemos que estar preparados para superar momentos difíciles".

Sobre los recién llegados, nueve hasta el momento -diez si se oficializa la llegada de Mamadou Koné-, el gijonés alabó su adaptación al grupo, y el grupo a ellos: "El equipo trabaja muy bien. La gente se ha integrado extraordinariamente, los que estaban los han acogido de una manera excepcional. Hemos sabido entender que teníamos que formar un buen equipo. Prefiero un buen equipo a una individualidad, un equipo gana partidos y consigue objetivos. Se entendió todo muy bien. El que venga sabe que viene a ayudar. En esa línea el equipo está trabajando muy bien".

Por último, Muñiz lanzó un mensaje necesario, quiso hacer entender a todos la nueva realidad a la que deben adaptarse todos: "Somos un equipo de Segunda y tenemos que ponernos a ese nivel. Hay que buscar la viabilidad del club y nos tenemos que adaptar todos a la categoría. Cada departamento. Todo el mundo pierde algo con el descenso. El club pierde presupuesto y tenemos que adaptarnos. Lo más importantes es la viabilidad y eso supone reducir gastos. No hay ninguna excepción. Conoceremos el autobús de arriba a abajo".

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios