Queda constancia que la situación del Málaga CF, pese a su actual estabilidad económica, es su propio límite. La intervención judicial que vive en estos momentos el Málaga desde hace ya más de dos años, la misma que ha salvado varios match ball que empujaban a la entidad a su disolución y desaparición, es también la que impide ganar vuelo con los recursos que dispone, imposibilita hasta que se resuelvan todas las vías judiciales de un cambio de llaves, de la llegada de nuevos inversores.

Ayer se conocía que RedBird Capital se hacía con la parte mayoritaria del AC Milan por valor de 1.200 millones de euros. El fondo norteamericano, propiedad de Gerry Cardinale alcanzó un acuerdo con Paul Elliott Singer, hasta el momento máximo responsable del conjunto rossonero, que recientemente volvió a alzarse con el Scudetto tras una larga época en la sombra.

Fue por estas mismas fechas del pasado año cuando apareció el nombre de RedBird Capital en el entorno del Málaga CF. El fondo norteamericano llegó con la intención de hacerse con el club de Martiricos. Llegó a comprar un paquete de 600 acciones de la entidad con la finalidad de estar más próximo ante una posible compra. Lo intentó cuando se plasmó la posibilidad cubrir la póliza de crédito de 8,6 millones que buscó la entidad. Fue la aparición del acuerdo de LaLiga con CVC lo que cambió los planes del club y la opción de estos se esfumó.

Fue una de las opciones más reales que presentó el Málaga ante un nuevo inversor, la opción más decidida y que además contaba con el favor de la Asociación de Pequeños Accionistas, que apoyaban su propuesta. No terminó cuajando precisamente por el techo de cristal que limita a la entidad, la propia intervención judicial que la salvó.

Hacía alusión a todo esto ayer José María Arrabal, secretario general para el Deporte de la Junta de Andalucía, en su intervención en Cope Málaga. “Se viene trabajando muy bien en estos años, se ha evitado un golpe”, explicaba Arrabal, que apunta a la necesidad de crear una estructura más sólida que permita trabajar a medio y largo plazo: “En la medida que una institución es estable y equilibrada, con los roles bien distribuidos, se pueden hacer planes a medio y largo plazo. Esto es fútbol, no son matemáticas, pero están sujetas a muchas variables y con un plan a medio-largo plazo tienes más probabilidades de éxito. Para marcar diferencias en cualquier organización, especialmente en el fútbol profesional, la estructura es fundamental”.