El Ayuntamiento de Marbella trabaja en la creación de una Escuela de Hostelería municipal, una iniciativa que proyecta para paliar “las necesidades de formación” o “de empleados” que tienen las empresas para encontrar personal cualificado, según ha anunciado este miércoles el concejal de empleo, Cristóbal garre.

Así lo ha destacado el edil a preguntas de los periodistas tras exponer la adhesión del Consistorio al programa regional Andalucía Orienta con la incorporación de siete técnicos para prestar el servicio en Marbella y San Pedro Alcántara.

Según el responsable municipal, el Ayuntamiento trabaja en la creación de un centro formativo de estas características para paliar “las necesidades de formación” o “de empleados” que ha asegurado que encuentran las empresas.

“Estamos asistiendo a un problema serio con los temas de cocina y camarero, es decir, que la mayor parte de las empresas no encuentran este perfil, con lo cual estamos trabajando en la posibilidad de hacer algo más serio en cuanto a formación en este aspecto en colaboración con el resto de administraciones”, ha afirmado garre.

En este sentido, ha asegurado que el Ayuntamiento está “trabajando en esa línea desde hace seis meses”, remarcando que “el problema principal es la ubicación”. Para la consecución del proyecto, Garre ha apuntado que ha solicitado a la Junta obtener la autorización para implantar la escuela en “espacios de referencia” regional como el Albergue África o la Residencia de Tiempo libre, una petición que está a la espera de la respuesta andaluza.

Además, ha indicado que en estos momentos el Consistorio se afana en “crear la comunidad” en el marco del programa ‘Marbella ciudad creativa inclusiva’, financiado con fondos EDUSI “de prácticamente un millón de euros”. “Estamos tratando ya de crear la comunidad y hacemos reuniones de más de 50 personas para dirigir la parte de la creatividad en los videojuegos, en la gastronómica y en la del resto de industrias creativas”, ha agregado.

En este punto, el responsable municipal ha detallado que la creación de esta comunidad implica el “localizar a los distintos actores” como pueden ser los proveedores, las estrellas Michelin, el alumnado, el profesorado, las asociaciones gastronómicas o las empresas relacionadas con el sector de la hostelería de manera previa a la obtención del espacio.

La finalidad es “recoger información y plasmarla en el edificio como un paso previo” y “crear el grupo motor de la escuela de hostelería” para que impulse el proyecto de la mano del Ayuntamiento para que el espacio formativo fuera una realidad en función de sus necesidades, ha señalado.