Coín, con una población de alrededor de 25.000 habitantes, ha sido tradicionalmente escenario de manifestaciones culturales de distinta índole, entre ellas la más recordada entre sus ciudadanos, el Coincierto. Un festival de un solo día de duración que agrupa a bandas del ámbito nacional y local. El 8 de septiembre vuelve a la provincia la tercera edición de este evento en el centro de la ciudad que, por un día, se convierte en un gran escenario al aire libre en el que ofrecerán, de manera gratuita, 12 horas de música ininterrumpida.

Así lo presentaron ayer el alcalde, Fernando Fernández; el concejal de festejos, Antonio Lucena; y los productores Iñaki Serrano y Paco Liñán. El año anterior el festival reunió a más de 5.000 personas en una sola jornada. Los asistentes podrán disfrutar de géneros muy variados, desde flamenco, rock, hip-hop, pop... Además, en las plazas del pueblo habrá una animación que durará desde las 14:00 hasta las 2:00. Esta edición se presentan dos novedades: el festival se alarga hasta 12 horas y el esfuerzo tanto del Ayuntamiento de Coín como de las promotoras organizadoras del festival por hacer esta cita más accesible los vecinos, los grandes nombres que normalmente forman parte del cartel de pago se unen a esta celebración de entrada libre.

El evento nació en los años ochenta, con el nombre cambiado pero manteniendo las horas de conciertos hasta el anochecer. En sus escenarios tuvieron a grupos como Reincidentes, Los Rodríguez, Kiko Veneno, Seguridad Social, Lagartija Nick o Radio Futura. Dos décadas más tarde la música volvió a recorrer las callejuelas del municipio. Coincierto sigue las premisas de sus pasadas ediciones, albergando un mercadillo de artesanía y productos del Valle del Guadalhorce. Asimismo tendrán habilitada una zona infantil gratuita con talleres didácticos y espectáculos, en el que el año pasado disfrutaron más de 500 niños y niñas.

De esta forma, el nuevo Coincierto recoge el testigo de su precedente con actuaciones de bandas españolas de renombre como O'Funkillo o Alba Molina, e incluso rescatando a algunas que allá por los 80 estuvieron en lo más alto, como Toreros Muertos. Igualmente contarán con Gordo Master o Little Pepe. El festival tampoco se olvida de ofrecer un trampolín a la escena local con bandas como Viva Reina y Flamencoin.

Toreros Muertos nació en los ochenta, en plena movida madrileña con un estilo músico-satírica. Los integrantes del grupo, el cantante, dibujante y cineasta gaditano Pablo Carbonell junto Many Moure y Guillermo Piccolini apuestan por "desenroscarle la cabeza a nuestro público y que se vaya del concierto dándole pataditas", como confesaron en una de sus actuaciones. Su propuesta, que oscila entre el punk, pop y el rock, también tiene renombre en Latinoamérica, se perfila como una de las alternativas más rompedoras y vigentes del actual panorama musical hispano.

Por su parte, Alba Molina hace años que superó aquello del "ser hija de". Lo hizo con su primer disco, con la mayoría de edad apenas cumplida, editó Despasito junto con su padre Manuel Molina y Alejandro Sanz, llevándose el galardón a la mejor artista revelación en los Premios de la Música y alcanzando el éxito de ventas. Después, su carrera ha transitado por el flamenco más racial, la fusión e incluso la experimentación. Ha colaborado con Leiva, de Pereza, ha girado con un proyecto que mezclaba flamenco y jazz. Sin duda, la música llenará de arte otro año más las calles de Coín.