Hay películas que reconcilian con el caos que a menudo es el Festival de Málaga. Cobardes merece ser destacada por muchos motivos: una precisa dirección de actores por la que Paz Padilla sale airosa en un papel dramático con el monstruo Lluís Homar como partenaire, uno de los guiones más asombrosos de los últimos años, un montaje acertadísimo con planos épicos (el cartel publicitario del tigre) o íntimos (el oso de peluche escondido en el armario) pero siempre significativos, un ritmo de arquitectura duradera y, por decir, unos títulos de crédito ciertamente originales. Pero lo verdaderamente importante de esta producción honrada y sincera (Corbacho y Cruz cuentan lo que querían contar, éste es el mérito) es su oportunidad histórica, un caso rematadamente raro en el (tan) aburrido cine español.

Los realizadores han tomado el espinoso asunto del acoso escolar y han decidido responder, con mucha dignidad, a Los 400 golpes de Truffaut: el adolescente no es una criatura incomprendida que necesita huir para encontrar su libertad, según la percepción rousseauniana, aún vigente, que convierte a todos los menores de edad en capullitos inocentes. Los adolescentes son personas y como tales los hay de todas clases, altruistas y criminales, generosos y envidiosos, confiados y ladrones, trabajadores y vagos. Y víctimas y verdugos. La oportunidad histórica a la que me refería tiene su razón en la dificultad (y la voluntad) que afrontan educadores, psicólogos y padres a la hora de distinguir unos de otros, verdadero leitmotiv de la película. Corbacho y Cruz tocan todos los palos: alumnos, profesores, padres, la clase política, los medios de comunicación y las relaciones entre todos ellos participan en una propuesta que incomodará a muchos (y éste es su gran valor), especialmente ahora que los padres empiezan a ser sancionados económicamente por la justicia a causa de los atropellos de sus hijos. Cobardes es una película necesaria, por la que Amenábar, si fuera inteligente, habría dado un brazo. Enhorabuena y gracias a todos los que han participado en ella.