Análisis

josé j. arenas

Físico de Sistemas Complejos Asesor del Centro de Ciencia Principia

El punto de no retorno

La comunidad científica lleva más de 30 años anunciando los riesgos del calentamiento global

El verano; ya agotado, moribundo, pronto será un recuerdo térmico… o… ¿o no?

A lo largo de las pasadas (y calurosas) vacaciones estivales, han surgido inquietantes noticias en medios de comunicación que se han hecho eco de un estudio publicado en Earth System Dynamics. Dicho estudio analiza las emisiones contaminantes y las posibles reducciones de estas en las próximas décadas por parte de los países firmantes del Acuerdo de París. De acuerdo con la propia redacción del texto, el objetivo es "reforzar la respuesta mundial a la amenaza del cambio climático, en el contexto del desarrollo sostenible y de los esfuerzos por erradicar la pobreza". El plan era tomar medidas para que el aumento de la temperatura global del planeta fuera inferior a los 2°C en 2100, respecto a los niveles preindustriales y, a ser posible, realizar esfuerzos adicionales para no superar los 1,5°C. Sin embargo, los investigadores del Centro de Utrecht para Estudios de Sistemas Complejos y de la Universidad de Oxford predicen que dichos aumentos de temperatura podrían provocar que otros mecanismos naturales se desencadenen y también influyan en el comúnmente denominado calentamiento global. Así, este efecto acumulativo podría desembocar en un cambio climático peligroso que habría que evitar con urgencia.

Bajo simulaciones por ordenador y con la información de diversos modelos climáticos, el estudio analizó varias fechas límite dependiendo de la reducción de emisiones de efecto invernadero y aumento de las energías renovables. La cota objetivo de los 1,5 °C queda ya prácticamente descartada salvo cambio radical en el sector energético en los próximos años. Por tanto, bajo un escenario más realista, la fecha límite para mantener el aumento en una cifra inferior a 2°C en 2100 (con probabilidad del 67%) y aumentar el uso de las energías renovables en un 2% anual sería 2035.

Donald Trump retiró el año pasado a los Estados Unidos del Acuerdo de París contra el Cambio Climático, firmado en aquel momento por 195 países. Unos meses después, cuando se acercaba la noche de fin de año, el presidente norteamericano se rio de ello comentando que a su país le iría bien algo de calentamiento global para combatir las frías temperaturas de Nochevieja.

Las cifras de calentamiento global alcanzadas, sus riesgos y su relación con la actividad humana llevan siendo anunciadas (y denunciadas) por la comunidad científica desde hace más de treinta años. Resulta curioso que algunos dirigentes políticos aún lo nieguen, lo que muestra los intereses bañados de torpeza de algunos de ellos.

Previsiblemente, el 3 de noviembre de 2020 habrá elecciones presidenciales en Estados Unidos. Si Trump es reelegido, ¿será ese el punto de no retorno?

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