La consejera de Agricultura, Carmen Crespo, y el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, firmaron ayer un "histórico" protocolo de colaboración que permitirá "transformar" el Guadalmedina y "hacerlo más seguro, sostenible y lleno de vida". El objetivo es la restauración ambiental y paisajista del río en su tramo urbano. A juicio de la consejera, se trata de "una gran alianza entre ambas administraciones con el reto de convertir el río en un elemento que una a la ciudad, en lugar de dividirla, como ha venido sucediendo históricamente".
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