AÚN no se conoce cuál será la estructura provincial de la Junta de Andalucía". Ésta fue la respuesta ayer de un dirigente socialista cuando este periódico le preguntó ayer por el nombramiento de los nuevos delegados del Gobierno andaluz en Málaga. Pese a todo, entre los funcionarios de la administración autonómico ya han comenzado a correr algunos posibles nombres para las delegaciones. El caso es que con el gobierno de coalición PSOE-IU de la pasada legislatura y en época de recortes, la estructura provincial de la Junta se redujo y fueron seis los delegados que representaron a las once consejerías del Ejecutivo andaluz. Pero ahora son 13 las áreas. El caso es que aunque el gabinete de Susana Díaz está en funcionamiento desde hace un mes, la demora en los nombramientos de todos los escalones inferiores al de los consejeros provoca cierta parálisis, sobre todo cuando en algunas empresas públicas nadie tiene firma para autorizar las operaciones. Pero la presidenta se está implicando personalmente en la designación de la mayoría de los cargos públicos de menor rango, se supone que para evitar futuras sorpresas. Pero agosto está ahí.