EL PSOE está de suerte, mañana Rajoy vendrá a Málaga a apoyar personalmente la campaña de Paco de la Torre. Pobre alcalde, cuando parecía que lo tenía todo a favor, no somos nadie. Y es que puedes borrar el PP del logo de la campaña, pero no puedes librarte del pesao de Rajoy. "Paco de la Torre sí, pero, perdonen ustedes las molestias, Mariano Rajoy también está por aquí. Será solo un segundo, aprovechen si tienen que ir al baño". Y para contrarrestar la visita de Rajoy, Bendodo ha tenido que programar una agenda desquiciada con 60 actos en 15 días. O sea, 4 al día, uno cada 6 horas, como el antibiótico. 60 actos a los que además acudirán casi exclusivamente los militantes de su partido. Y uno se pregunta, ¿de qué sirve llenar un recinto con nosecuantos miles de militantes? ¿Ayuda eso a que te voten el resto de ciudadanos? Las campañas suponen una actividad frenética y agotadora, un coste disparatado y un beneficio casi nulo para ellos y, lo que es peor, para nosotros. Hoy en día sobran foros y canales para comunicarse con la sociedad, que además rechaza frontalmente ir a estas comuniones de banderitas y glorificación. Incluso el número de militantes de los partidos tradicionales está cayendo en picado, posiblemente a fuerza de tratarlos más bien como militontos y hacerles corear unos eslóganes de lo más absurdos, como "Alozaina estoy por ti" o "Paco de la Torre sí". ¿Sí qué?

Pero, ¿qué sentido tiene reunirte con una gente que ya acude agitando tu banderita? Están ya entregados, les digas lo que les digas. "Paco de la Torre exigirá una libra de carne por aparcar en el centro." Y todos aplauden fervorosos, gritando "¡Bravo!¡Bravo!¡De la Torre sí!". Y así en decenas de actos, donde reciben su propio eco más que otra cosa. No necesitan reunirse con sus incondicionales para conocer su opinión, piensan punto por punto lo que les han pedido que piensen. Lo que tendría interés es reunirse con la gente que no les quiere votar y averiguar por qué. "De esta lista que le propongo, ¿quién le gusta y quién no le gusta? ¿Qué cosas de las que hemos hecho le parecen bien? ¿Cuáles mal?" Los actos con militantes no les acercan a la sociedad, les aíslan de ella. Son un placentero y gozoso baño de multitudes, pero nunca un baño de realidad. Y así les dan luego los baños que les dan.